Una esperanza y un revés
El Betis llega a Arabia Saudí con la ausencia de Álex Moreno como condicionante. Pellegrini activa su plan y espera las respuestas del club.
EI Betis aterrizó en Arabia Saudí con la ilusión como mayor exponente a las puertas de encarar una Supercopa repleta de desafíos. Los pretende agarrar todos con la esperanza de pelear por un título sólo unos meses después de haber levantado la Copa del Rey. Al plan de Pellegrini, siempre fiable, se le cae una pieza de forma inesperada: Álex Moreno no se unió a la expedición ante el cierre previsto de su traspaso al Aston Villa.
No se trata de una ausencia cualquiera. Su baja altera de forma sustancial las previsiones de su técnico. Es velocidad, verticalidad y un arma eficiente que rompe líneas. El imprevisto quizás tenía algo de previsible tras una negociación que se remonta a semanas y que cuenta con el deseo de Unai Emery como gran incentivo para el futbolista. Para el Betis, la realidad económica no permite esquivar muchas balas: el ofrecimiento es de 13,5 millones más 1,5 en variables. Las cuentas piden salidas y la de Álex Moreno quizás no sea la única. El nombre de Borja Iglesias sigue centrando algunos focos y en Heliópolis no se descarta un amago de revolución en el mercado pese a que el plan inicial era no estar presentes en el mismo.
La realidad deportiva es que el Betis encara la pelea por un título sin su lateral izquierdo titular. Miranda asume su rol de protagonismo y tratará de convencer a Pellegrini sobre que su papel a pripri secundario tiene el poder de una transformación rápida. Pero el chileno también espera respuestas por parte del club, que hace cuentas para tratar de suplir ese evidente revés. El esfuerzo por evitar salidas no podía sostenerse para siempre y en ese contexto aparecen ya sobre la mesa nombres como los de Akieme o Fran García. También se barajan alternativas que no supongan tanto coste.
Más allá de la inesperada ausencia de Álex, el Betis llega a Arabia Saudí con la moral alta tras su triunfo en Vallecas y la sensación de tener muy poco que perder en la Supercopa. Pellegrini ya sabe lo que es vencer al Barça de Xavi y su receta quizás tenga ingredientes parecidos este jueves. Sin Álex, pero con el ímpetu de Canales, el talento de Fekir y la fe de Borja Iglesias. Hay optimismo en un grupo que se ganó por méritos propios el optar a otra corona de grandeza.