Un joven triunfador que quiere romper con el pasado

La figura de Jon Uriarte se ha ido agigantando conforme pasaban los días en la agotadora campaña electoral del Athletic. Fue el último en colocarse en los tacos de salida en esta carrera de obstáculos desatada hace cinco semanas, pero también el que lo hizo con más fuerza. Hasta que no acabó la temporada, permaneció en sus cuarteles de invierno madurando su proyecto. Aquel 22 de mayo cambiaron los esquemas de unas elecciones llamadas a un pulso entre Barkala y Arechabaleta, es decir, el representante de la pinza PNV-Bilbu y el del grupo mediático Vocento.

De Uriarte sólo se conocía que era un emprendedor de éxito, un joven triunfador que suscitaba mucha envidia en Bilbao. Su ascensión se forjó en los negocios en la ‘City’ londiense. En 2010, a su regreso de un periplo laboral en Londres, fundó junto a su amigo Ander Michelena la empresa Ticketbis, que vendía entradas para todo tipo de eventos deportivos y culturales. Se inspiraron en StubHub, una firma de enorme relevancia en Estados Unidos, pero que no tenía una réplica en el resto del mundo. La implantaron primero en España y la expandieron posteriormente por 48 países. Seis años después de su puesta en marcha, la vendieron a eBay por 165 millones.

El nuevo presidente tuvo que salvar unas cuantas turbulencias en estos últimos días de campaña. Su estrategia ha estado llena de lagunas, pero no le han penalizado, ha primado su afán por poner el club patas arriba. Le acusaron de contar con un simpatizante de VOX en su equipo y de querer entrar en el Athletic para hacer negocio con la empresa All Iron Group, dedicada al asesoramiento integral a deportistas y con intereses diversos como startups y oportunidades inmobiliarias. Es cofundador de la misma. Se vio forzado a prescindir del director deportivo, el mexicano Carlos Aviña, por unos tuits homófobos y machistas de hace diez años. Pero amortiguó el golpe echando mano del victimismo, gritando que no le iban a vencer el ‘establishment’ y la ‘guerra sucia’ contra lo que él definía como “un soplo de aire fresco”. Nada de eso le penalizó camino de un 24-J en el que arrolló a todo lo que le pusieron por delante. El empuje final lo dio con Ernesto Valverde, con el que comparte alguna inversión. Jon representa la propuesta joven, atrevida, moderna. A sus 44 años, se encuentra con el gran sueño de su vida.. Es hijo de Pedro Luis Uriarte, exconsejero nacionalista de Economía y Hacienda del primer Gobierno Vasco entre 1980 y 1984, y Mari Emili Uranga, hermana de Luis, expresidente de la Real Sociedad, y licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Deusto.

La imagen de Jon ha estado muy alejada de otra mucho más clásica de sus adversarios. Presenta una figura longilínea esculpida en el triatlón y el golf. En campaña prometía un ‘electroshock’ en uno de los clubes más apegados a la tradición y la historia. El responsable de Lezama será Sergio Navarro, procedente del Levante y con experiencia en el Rubin Kazan. También habrá un director de desarrollo deportivo y de cesiones y un responsable de rendimiento. Apuesta por la mejora de la captación temprana, con un nuevo líder en la unidad de reclutamiento. Se propone integrar la estructura del equipo femenino y masculino. Pretende montar una gala One Club Man, el premio a jugadores que han desarrollado su carrera en una sola entidad, con una gira de verano, y crear un Club de Empresas del Athletic y una sede social.