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Todo gira en torno a Bellingham

El cambio de esquema de Ancelotti, a prueba en UCLA, maneja variantes con un punto en común: la bisagra que conecta líneas y debe ser diferencial es el centrocampista inglés.

Los Ángeles (California)
Ancelotti y Bellingham, de vuelta al trabajo.
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Todo gira en torno a Bellingham. La bisagra del nuevo dibujo que este periódico ya adelantó y Ancelotti se encargó de confirmar. Primero ante las cámaras del Soccer Champions Tour, después en UCLA al ser entrevistado por los medios desplazados y finalmente sobre el verde del Wallis Annenberg. “¿El sustituto de Benzema? Ya lo tenemos: puede ser Joselu o el nuevo esquema”, reconoció. Aunque antes no descartó lo bueno conocido si lo nuevo no fluye: “Siempre podemos volver al antiguo, que nos ha dado resultado”. Todo ello ha pasado por el laboratorio en el que el italiano ha convertido los primeros entrenamientos en Los Ángeles.

Todo gira en torno a Bellingham

El dibujo con la papeleta ganadora es el 4-4-2, con Bellingham como eje del diamante, con permutas momentaneas a un 4-3-3 donde el inglés ha hecho labores de ‘falso nueve’. Los acompañantes han ido fluctuando. Si Camavinga aparecía de pivote y Valverde y Modric de escuderos, el inglés ha ejercido de trequartista. Mientras que Carletto también ha tratado de rediseñar su 4-3-3 fetiche con Jude como punta de lanza, colocando, en este caso a Valverde, Kroos y Nico Paz en la sala de máquinas con el alemán como stopper. Brahim y Rodrygo han sido la pareja de ataque en el primero, con el malagueño y Vini escoltando al ‘5′ en el segundo.

Esquemas que ha probado Ancelotti en UCLA.
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Esquemas que ha probado Ancelotti en UCLA.

Una de las alternativas que ha manejado, que aparece como plan B, es utilizar un 4-2-3-1 donde Arda Güler se perfila como el ‘diez’ de guardia, hasta que sus molestias en la pierna se lo han permitido, y la lanzadera de un Joselu que está dejando muy buenas sensaciones. El ‘14′ está siendo objetivo habitual, además, en las jugadas de estrategia donde está demostrando que en caso de necesidad, colgar balones sí puede tener un retorno positivo para el equipo blanco.

Ayudas y verticalidad

No obstante, la premisa que se ha encargado de repetir hasta la saciedad Ancelotti es la intensidad. “Encima, encima, no le dejes pensar”, se ha escuchado en los campos de UCLA en repetidas ocasiones. Carletto es consciente que en el nuevo dibujo, sin un delantero centro al uso, el derroche físico es innegociable. Basculaciones, presión constante, interiores cubriendo las espaldas a los atacantes, infinidad de ayudas y pivotes sujetos para que el vuelo lo aporte el resto. Porque queda claro que este Real Madrid será, eso se extrae de los primeros ensayos, más vertiginoso y a la caza del espacio para aprovechar el poderío físico con el que cuenta del centro del campo en adelante.

Y todo, con Bellingham como maestro de ceremonias. El de Stourbridge contará con total libertad para potenciar su buena llegada al área, para bajar a recibir y comenzar a cabalgar. Si Ancelotti considera que el Madrid tiene “mejor plantilla” que el curso pasado, es porque entiende que puede exprimir a Jude y que sus cifras goleadores (en su último año en Dortmund firmó 15 tantos) sigan aumentando. De hecho, en el partidillo del viernes fue el encargado de marcar el único gol del partido. Esta madrugada, el Milan será la primera piedra de toque para este Real Madrid 2023-24 con tanto por experimentar.