Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola
Betis - Villarreal | Palermo

“Soy el último que le ha ganado una gran final al Real Madrid”

Martín Palermo (La Plata, Argentina, 1973) jugó 81 partidos con el Villarreal, con 21 goles. Luego se marchó al Betis y estuvo en Heliópolis apenas seis meses.

Martín Palermo.
Juan Pablo Pino
José A. Espina
Jefe de Sección de Diario AS en Andalucía. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Sevilla. Pegando teclazos desde 1998, durante toda una década en Madrid (2000-2010). Sevilla, Betis, Selección española y lo que se ponga por delante. Loco por el fútbol, guarda un poco de esa pasión para su otro deporte favorito, el tenis.
Actualizado a

Fernando Roig pagó unos 8 millones de euros por el 50 por ciento del pase de Palermo, estrella mundial por haber machacado al Real Madrid en la Intercontinental de 2000 (dos goles) con Boca Juniors. Tras un comienzo prometedor, en Copa ante el Levante llegó el momento fatídico: fue a celebrar un gol con los aficionados y le cayó en la pierna un muro que le fracturó la tibia y el peroné. Apenas duró un año más como amarillo y el Betis le firmó en el verano de 2003. Después de seis meses en Heliópolis y de otros cinco en Segunda, con el Alavés, retornó a Boca para volver a convertirse en ídolo goleador y futbolístico hasta su retirada en 2011. Como entrenador ha dirigido a Godoy Cruz, Arsenal, Aldosivi, Platense (Argentina), Unión Española y Curicó Unido (Chile), Pachuca (México) y Olimpia de Paraguay, del que fue destituido esta misma semana tras devolver al equipo a la liguilla de la Copa Libertadores.

En España no triunfó como delantero, pero se le sigue teniendo mucho cariño por su carisma. ¿No le apetecería entrenar allí?

Es una de las cosas que busco, claro. Me encanta LaLiga, es de los mejores campeonatos del Mundo. Como técnico me siento más maduro, ya son 12 años en los banquillos.

¿Algún interés de aquí?

No he tenido contactos, no. Pero de clubes como Villarreal, Betis y Alavés tengo los mejores recuerdos, aunque allí no cumpliera las expectativas.

Llegó a Villarreal como una auténtica estrella Mundial, tras sus goles al Real Madrid en Japón. ¿Fue aquel el mejor momento de su carrera?

No sé si calificarlo así, pero está claro que es el momento más mediático. Aquel triunfo me puso en el mapa universal. Sé que soy el último que le gané una gran final al Madrid. Siempre que los blancos levantan un Mundial o una Champions está presente que los últimos en ganarles una final fuimos nosotros, Boca, en 2000. ¡Hace 25 años!

“Aquellos argentinos pusimos las bases del gran Villarreal que ha habido después”.

Martín Palermo.

Aquel Villarreal al que llegó Palermo se parece poco a este, que se codea con la elite ya y hasta ganó un título europeo.

Aterricé en una época de crecimiento. Hacía tiempo que había subido a Primera y Roig tenía claro dónde quería llevar el club. Con esas grandes contrataciones de argentinos, principalmente de Boca (Arruabarrena, Cagna, Riquelme) se pusieron las bases de ahora. Me hubiese gustado llegar cuando empezó a jugar Champions y Europa League, que eran otros planteles. Pero no reniego de aquello. Tuve una gran experiencia en el fútbol español. Aquella lesión del muro llegó en mi mejor momento de adaptación y luego...

Luego, el Betis. Duró seis meses. Con Lopera.

Sé que es un club en el que se me sigue respetando y me alegro de que esté pasando un buen momento con Pellegrini. Lopera era un dirigente difícil, a veces nos daba charlas antes de los partidos y si las cosas no estaban bien nos mandaba retos. Pero fue un presidente con mucha historia.

“Lopera era un dirigente difícil, nos daba charlas antes de los partidos del Betis”

Martín Palermo.

¿Cómo se atrevió a irse a Segunda e intentar subir al Alavés?

De haber ascendido quizá me habría quedado allí. Ese paso por Vitoria me reactivó. Fueron tres meses en los que me volví a sentir importante. Y también tener un entrenador como Pepe Mel, que me pidió cuando se lesionó Iván Alonso. Mel es de los técnicos que más me han marcado.

Usted fue nombrado ‘Mejor cabeceador del mundo’ en 2008 por la FIFA.

Yo sabía que era mi gran virtud, y lo seguí trabajando toda mi carrera. Desde muy pequeño me ayudó que, aparte del fútbol, hice baloncesto y vóley. El secreto es darle orientación al cabezazo, técnica y potencia. Y fue fundamental tener compañeros, sobre todo en Boca, que sabían donde me iba a colocar dentro del área. El gran cabeceador no existe sin los buenos centros.

“El 9 de área de hoy es más completo, pero el Madrid no necesita un jugador así”

Martín Palermo.

¿Cree que se está perdiendo ese 9 de área, como usted?

Los hay, y muy buenos. Y más completos, porque los tiempos cambian. Haaland, Lewandowski, Lautaro... además de grandes rematadores, tienen mucha participación en el juego. El Real Madrid, por ejemplo, no dispone de un jugador de esas características porque no le hace falta.

Hay críticas a eso.

Mbappé, Rodrygo y Vinicius ya hacen muchos goles. Ahora no tienen un 9 como Benzema, pero hasta él era mucho más completo. El Madrid, para hacerle sitio a Haaland, habría de modificar su manera de jugar, la idea del entrenador.

“Pocos títulos hay más grandes que haber jugado junto a Maradona y Messi”

Martín Palermo.

Palermo allanó la clasificación para el Mundial 2010 usted con su gol en Perú. Argentina ha ganado varias cosas después. Si usted hubiera tenido al mejor Lionel Messi de asistente en Argentina...

Qué sé yo... Son épocas distintas. Me tocó un momento distinto al de Lionel. Messi venía de ganar todo con el Barcelona pero era joven aún en la Selección. No era el Messi que terminó consagrándose con Argentina, le llevó mucho tiempo lograrlo. Cualquier delantero agradece tenerle al lado, todavía hoy.

Y en Boca, además, usted había estado con Maradona. ¿Es más de papá, o de mamá?

¿Para qué elegir? Me siento un privilegiado por haber jugado junto a los dos, y por conocerles. Todos saben lo que significa para mí Diego, el cariño que había. Y junto a Leo viví un Mundial. A veces me parece increíble haber compartido cancha con ambos, pocos títulos hay más grandes.

“Yo soy Paula y sales en mi canción, la de Sabina”

No solo los goles: también la música inmortalizó a Martín con aquel “Le toca a Palermo tocar el balón” que Joaquín Sabina dedicó al delantero en su canción Dieguitos y Mafaldas, de 1999. En ella, el tremendo compositor jienense relata su amor con una joven aficionada de Boca Juniors, Paula Seminara. Palermo casi se ruboriza cuando habla de la copla: “Sí, puede decirse que aquella canción de Sabina es uno de mis mejores goles (risas). Es un gran orgullo. Precisamente, en el año 2023, Paula me contactó por Instagram y me dijo ‘Yo soy Paula y sales en mi canción, la de Sabina”.

Noticias relacionadas

“En 1999 yo no era mucho de seguir a Sabina, aunque sabía la gran relevancia que tenía y sigue teniendo en Argentina”, reconoce Palermo. “Me han hecho canciones los hinchas, sí, pero no con esa trascendencia. En 2001 pude conocer a Joaquín, en España: estaba alojado en el hotel de Málaga donde me concentraba con el Villarreal. Desde entonces, siempre que puedo voy a verle”.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí

Etiquetado en:

Comentarios
Normas

Rellene su nombre y apellidos para comentar

Tu opinión se publicará con nombres y apellidos

Te recomendamos en LaLiga EA Sports

Productos recomendados