Saúl vuelve al inicio
El 8, titular ante Osasuna, rival frente al que arrancó su renacimiento. Recupera el sitio y el duende. Arrasate nunca ganó a Simeone.
Osasuna se ha convertido para Saúl (Elche, 1994; 28 años) en su carrera como uno de esos nombres desde los que explicarle como una vez lo fueron Madrid, Bayern y Leverkusen. El Madrid y aquella chilena. El Leverkusen y el golpe al riñón que le obligó a jugar con un catéter dos años mientras miccionaba sangre. El Bayern y la noche en la que mató todos los fantasmas de la final de Bruselas mientras acercaba al Atleti a la final de Milán 2016. El de Osasuna es el nombre de su nuevo comienzo. Allá donde empezó su resurrección (sigue el partido en directo en AS.com).
Porque este Saúl de la 23-24 ya sí recuerda al Saúl de antes del Chelsea. Del de aquel que era antes de que se perdiera en los viajes obligados al lateral izquierdo tras la marcha de Filipe en 2019. Fue entonces cuando comenzó a perder ese sitio inamovible en el once del Cholo. El jugador de campo con más minutos en la 19-20 (4.246′), el segundo de campo que más en la 18-19 (3.911′), el primero a secas en la 17-18 (4.751′). Pero se apagó en esos viajes que comenzaron a pesar en su cabeza y sus piernas. La cesión en el Chelsea no mejoró. En Londres, Saúl, solo sentiría llover. Agua y nostalgia. En la Premier jugaría solo 475 minutos, diez partidos.
La temporada pasada regresó al Atleti sin el dorsal que vestía, el 8, para ser intrascendente e insípido, un Saúl gris que se había terminado quedando en ningún lugar. Jugó 1.084′ en Liga y solo hizo tres goles. El primero en El Sadar, ante Osasuna. El segundo, ante Osasuna, una vuelta después. El tercero, al día siguiente del segundo ante Osasuna. Todo lleva al mismo lugar. Este verano estaba llamado a salir para cuadrar cuentas, pero él señaló el 8 y dijo: “Quiero quedarme”.
En cinco partidos de Liga y uno de Champions ha jugado ya un tercio de los minutos de la temporada anterior (337′). Lejos del lateral y en su sitio, dándole la razón a Saúl, le aporta al equipo físico, continuidad (no se lesiona), presencia, ida y vuelta, trabajo y asistencias: en el derbi dio dos. Todo comenzó ante Osasuna y en ese lugar al que hoy vuelve como titular. Es el rival al que más goles ha marcado (3) en menos partidos (8).
Tampoco tiene más el Cholo en el centro. Ayer amaneció con otras dos bajas (Memphis y Savic) que unidas a las que ya tiene son ocho, es decir, solo 13 de campo disponibles (los once que juegan más Grbic, Riquelme, Witsel y Galán). Simeone ha ganado un 93,3% de los partidos en Liga ante Osasuna (15 partidos, 14 victorias y una derrota). Viene el Madrid con Mestalla ya lejos, borrada por el derbi y su victoria. Aunque esquilmado por las bajas.
Arrasate nunca ha ganado al Atleti. Diez partidos, diez derrotas. Busca Osasuna su primera victoria en casa de esta Liga sin que el técnico rojillo diera ayer pistas. Habitualmente juega con un 4-1-4-1, pero ante el Sevilla optó por un 4-2-3-1. Vuelve Moncayola. Habrá 20.000 en la grada. Y el Saúl de siempre de vuelta sobre su césped.
Primera vuelta de Azpilicueta a El Sadar
Recordar a César Azpilicueta (Zizur Mayor, 1989; 34 años) en las instalaciones de Tajonar o en los partidos de El Sadar, es recordar a un chaval, insultantemente joven, cargado de sueños y que siempre lucía una sonrisa en la cara. Sin haber cumplido la mayoría de edad, Ziganda le hizo debutar en el club rojillo en un partido de Copa ante el Getafe disputado el 28 de febrero de 2007. El 8 de abril debutó en Primera División en una derrota ante el Real Madrid (2-0) en el Estadio Santiago Bernabéu. Jugó en el equipo de su vida nada menos que 12 temporadas y durante muchas de ellas ocuparon, junto a su gran amigo, Nacho Monreal, los laterales de la zaga rojilla. Camacho dijo de ellos que eran los mejores laterales de la Liga de aquella época. No se equivocó porque ambos han tenido unas carreras meteóricas. César Azpilicueta volverá a jugar esta noche en el Sadar más de 13 años después. Su último encuentro como rojillo lo jugó el 16 de mayo de 2010, en El Sadar, frente al Xerez.