Rubi, el técnico que dio estabilidad y calma en la marejada de Turki
El catalán, que no renovará, creó unas bases sólidas en el momento más convulso desde la llegada del jeque. Segundo entrenador con más partidos y victorias con el Almería, entra en la historia tras su doblete: permanencia y ascenso.
Si con Alfonso García el Almería era una trituradora de entrenadores, la llegada de Turki Al-Sheikh en agosto de 2019 no cambió el panorama, con cuatro técnicos en cuatro meses. Hasta que aterrizó Rubi a finales de abril de 2021. El perfil del técnico catalán, consagrado en el fútbol español, era totalmente diferente a las apuestas de la propiedad árabe. Pero funcionó hasta el punto de ser el artífice del Almería que logró por fin el ascenso a Primera División tras la fuerte apuesta económica tras la compraventa del club, logrando ayer la quinta permanencia del equipo rojiblanco en la máxima categoría, la primera desde 2014; de hecho, el vilasarense es el único entrenador de la historia indálica en hacer doblete (ascenso a la élite y posterior permanencia) y el tercero de los siete cursos en Primera en completar la temporada, algo que el propio Rubi apenas había hecho en el Espanyol.
Más allá de todas las estadísticas y de entrar en la historia del deporte almeriense, Rubi quedará como el técnico que proporcionó estabilidad y calma en la marejada que estaba siendo el Almería en ese momento, un punto de inflexión para romper por fin la puerta que da acceso a Primera División. Con diferentes errores, es de justicia reconocer que la directiva acertó en darle continuidad en los peores momentos tanto en Segunda División (con ese gris enero de 2022), como en los de la actual campaña, con cuatro derrotas consecutivas o partidos como el 6-2 en Gerona.
De hecho, hace unos meses la continuidad parecía más cercana que la marcha. El propio director general de la UDA, Mohamed El Assy, apuntó en esta línea en la presentación de Mariño: “La relación con Rubi es muy cercana y ya estamos planificando la próxima temporada, seguro que pronto llegaremos a un acuerdo con él. El mes pasado estuvimos centrados en otras cosas, jugadores, pretemporada, fichajes... Ahora nos centraremos en eso. Queremos que siga”.
Sin embargo, ayer, tras conseguir la permanencia en Cornellá, el técnico catalán, anunciaba que ponía punto y final en el Mediterráneo, sin ampliar su relación contractual con la entidad al considerar que se ha cumplido un ciclo, máxime tras el desgaste de la relación en los últimos meses: “El cuerpo técnico da por concluido su ciclo en el Almería, no vamos a continuar la temporada que viene, estamos superagradecidos a todo el mundo. Hemos cumplido de largo los objetivos, con permanencia, ascenso y revalorización de los jugadores. Algo que nos llena de orgullo es el crecimiento deportivo del club. Cuando llegamos estaba la cosa muy vacía. Los próximos técnicos que vengan seguro que se van a encontrar rutinas, disciplinas, hábitos y forma de trabajar construidas para el futuro. Muchísimas gracias a todos”.
Lo hizo con una educación exquisita y una caballerosidad indudable: “Escojo este momento para no hacer perder tiempo al club y que pueda ya trabajar con lo que tenga que hacer. Recomiendo a los que no conozcáis Almería visitarla, es muy bonita y su gente, muy amable”. En una entrevista concedida a este medio en noviembre de 2021, ya afirmó que “las cuatro esquinas de España son algo desconocidas, pero superbonitas”, destacando en materia deportiva que el tramo final del ejercicio 20-21 se lo tomó para construir las bases de lo que es ahora el Almería, un club bien diferente al que era cuando aterrizó en el Estadio de los Juegos Mediterráneos.
En este tiempo, el cuadragésimo quinto técnico de la historia del club (contando a Óscar Fernández, que no llegó a debutar tras ser destituido, y sin tener en cuenta a Zubeldía, cuya ficha no se pudo tramitar por asuntos burocráticos), ha batido varios registros, además del difícil ascenso y permanencia. Por ejemplo, se marcha del Almería siendo el segundo entrenador, junto a Unai Emery, que más victorias ha conseguido en partido oficial (39), sólo por detrás de Casuco (52). Éste, es, con 127 partidos, el único que ha dirigido al Almería más veces que el propio Rubi, quien se queda en 92, superando esta temporada al propio Emery (84). A pesar de las críticas recibidas, toma la rampa de salida historia viva del club almeriense, el técnico que dio estabilidad y calma en el momento más difícil desde el aterrizaje del jeque.