Roses, la Girona más ‘brava’ y madridista
La inauguración de la peña madridista de Roses se convirtió en un acto reivindicativo de la afición vikinga de la zona que he visto en pocos lugares de España, con 200 aficionados.
Roses es un precioso pueblo ubicado en la comarca del Alto Ampurdán (Girona), en plena Costa Brava. Un pueblo que gracias al turismo sufrió un boom demográfico, pasando de 2.710 habitantes en 1950 a los 20.000 actuales, muchos de los cuales son franceses afincados aquí gracias a la cercanía del país vecino. Pasear por sus calas es bastante recomendable: Canyelles Petites, La Almadraba, Cabo Forneu, Punta Falconera y Montjoi. Su alcalde, Joan Plana, es culé, pero mostró su fair play y su buen talante al acudir personalmente al acto de estreno de la peña madridista de Roses, que se convirtió en un acto reivindicativo de la afición vikinga de la zona que he visto en pocos lugares de España. Casi 200 aficionados colapsaron la sede del Bar Arlequín, desbordado por la pasión blanca que se vivió durante varias horas en una velada inolvidable. El presidente, José Moreno, ha aglutinado esta resistencia madridista en territorio culé al frente del negocio de la familia Moreno Barragán, con su padre, José Lorenzo, su madre Carmen y su hermana Lucía al frente. Buena gente que desde Pozoblanco (Córdoba) emigró hasta aquí hace 36 años para ganarse la vida y, además, seguir defendiendo la bandera de su amado Real Madrid. Doy fe de que esta buena gente me hizo probar la mejor tortilla de patatas que he comido jamás en toda la piel de oro...
La fiesta madridista fue un éxito, con una réplica de la 14 transportada por Sergio Díaz Caballero y José Luis Vicente, de la peña de El Prat y artífices de que el peñismo blanco en Cataluña siga en plena forma. El presidente de la peña de Olot estaba a su lado. Hablamos de todo. Del City, de la final de Copa, de Negreira y de la grandeza del club que les hace vivir 24 horas al día con un sentimiento white que en Roses está a flor de piel...