Ribadeo y los 44 años de Lugo latiendo rojiblanco
La Peña Atlética Lucense celebró su aniversario este fin de semana con un homenaje a Cubelo, que jugó en el Aviación, y apadrinado por Marcelino.
Manuel Valin pudo respirar al fin cuando el periodista recién jubilado de El Progreso, Javier Ribera, agarró el micrófono para comenzar el coloquio con Marcelino que ponía fin al 44º aniversario de la Peña Atlética Lucense, la primera rojiblanca en Galicia, fundada en 1978, y que había trasladado la celebración a Ribadeo, bajo su organización. Directivo de la peña, encargado del área de La Mariña, comarca de la que son 27, 28 socios de los 195 que forman la agrupación, su cabeza ha sido un ir y venir de ideas desde septiembre, cuando comenzó a preparar la fiesta de cumpleaños a una hora en coche de Lugo capital. “Como en casa”, era el lema. Que todos los asistentes se sintieran así. Desde la leyenda, Marcelino, en representación del club, hasta el último de los 70 presentes en la cena en el restaurante Marinero, situado en el puerto de la localidad, pasando por el presidente Manuel Sedano.
Sin mesas presidenciales, todas pensadas como en una boda donde todas se configuran con gente que ‘encaja’, el aniversario sirvió para recordar, y homenajear, la figura de Sebastián Luaces, nacido en Ribadeo y conocido como Cubelo: llegó a vestir la rojiblanca, esa camiseta que en la tarde-noche era el novio y la novia, esa camiseta que a 500 kilómetros del Metropolitano se siente piel propia cada fin de semana, desde hace tanto, más de cuatro décadas. Jugó dos amistosos con el escudo del Aviación, uno con una victoria sobre el Real Madrid, en los años cuarenta, mientras hacía el servicio militar en Madrid, una réplica del carné como jugador rojiblanco así lo acreditaba. Se imprimió en grande junto a su foto formando el once en uno de los dos partidos.
Fallecido ya, sus hijos, Gloria y Antonio protagonizaron uno de los momentos más emotivos de la noche al recoger una camiseta con el nombre de su padre a la espalda de la rojiblanca, de la camiseta del Lugo, entregada por José Manuel Rozas, peñista además de la Lucense, y de la del Ribadeo, entregada por Pedro Posada. El Ribadeo, el equipo de la localidad, ahora en Regional Preferente, que poco después de la época de Cubelo, jugaba en Tercera y tenía en sus filas a Suso Meilan, central contundente y fino al que ponían un avión cada fin de semana para que viajara de Madrid, donde hacía la mili, a Ribadeo para jugar. Hoy es socio de la Lucense y los lunes son de debate acalorado en Mondoñedo a la una de la tarde sobre el Atlético y su juego.
Con la presencia de miembros de tres peñas cercanas, de la zona norte también, ‘Un Sentimiento de La Bañeza’, León, con Nino, representante también de La Unión, Raquel e Indalecio; ‘Furia Leonesa’, con Óscar y Vanesa; y la de O Porriño, Vigo, con Sonia y Puri; fue desarrollándose el acto, entre los nervios de Valin y el paso de invitados por el photocall encargado para la ocasión. Otro de los momentos fue el homenaje a María Teresa Franco Martínez, Tita, la primera presidenta, la mujer que se puso al frente el 15 de diciembre de 1978, en la constitución de la Peña Atlética Lucense en la cafetería Madrid de plaza de España.
Una mujer que no pudo asistir al aniversario pero en su lugar estaba su hermano Manuel, que como en el caso de los hijos de Cubelo, recogió con emoción el obsequio. La primera de los presidentes que la peña ha tenido en sus 44 años de historia hasta llegar a Manuel Sedano, en la actualidad (uno de ellos, Manuel Carlos, ya fallecido). Un Manuel que agarraba de un extremo de la bufanda tamaño XL que el club obsequia a las peñas en su aniversario, junto a Marcelino y Valin, momentos antes de que comenzara el coloquio que terminaría de soplarle las velas a un aniversario inolvidable, este de la Lucense en Ribadeo. Marcos, el dj de Sound System a cargo de la música, sólo tenía una orden: que sonara alto el himno del Atleti entre canciones de Dani Martín, ‘Dieciocho’, Leiva o Sabina.