Reguilón se apunta al 2023
El lateral izquierdo disputó 33 minutos contra el Elche en su segunda aparición con el Atlético. Ya al mismo ritmo que sus compañeros, es un refuerzo para la segunda vuelta.
Suele decirse aquello de año nuevo, vida nueva. En el caso de Sergio Reguilón, su nueva vida ha llegado tras varios meses lesionado, desde su incorporación al Atlético recién operado de una pubalgia hasta su debut pocos días antes del parón mundialista. El lateral izquierdo, firmado como cedido a última hora en el mercado veraniego, se ha convertido en un refuerzo invernal para Simeone, después de no haber podido entrar en los planes del técnico en sus primeras semanas de rojiblanco.
Y, ante el Elche, comenzó a dejar señales de lo que puede aportar al Atlético. El Cholo recurrió al madrileño cuando comenzaba a romperse el partido, tras la expulsión de Hermoso y el gol de João Félix que abría el marcador. Carrasco había quedado como lateral izquierdo momentáneo y pese a que Reinildo también era una opción para el técnico, se decantó por un jugador que ha aprovechado el último mes para ponerse al mismo ritmo que sus compañeros y mostrar a su técnico los motivos por los que había pedido su incorporación.
Hasta el momento, Reguilón únicamente había participado 21 minutos en la derrota en Mallorca, el último partido de Liga antes del parón. Si podía ser titular ante el Almazán, un cuadro digestivo agudo le obligó a ser ingresado en el hospital. Y este mes y medio sin competición le ha servido para llevar a cabo la pretemporada que no tuvo. En sus 33 minutos contra el Elche se presentó ante su nueva afición, que de partida le reprochó con silbidos su pasado en el Real Madrid. Sin embargo, cumplió con el cometido que le había encargado Simeone, sumándose con peligro por la banda, estirando al equipo, llegando a línea de fondo con peligro y sin descuidar su espalda en defensa.
En total, Reguilón completó 20 pases de los 23 que intentó (Carrasco había realizado 14 en 57 minutos), llevó a cabo una entrada exitosa que podía suponer peligro para Oblak y se midió en cuatro duelos cuerpo a cuerpo. Su buen hacer en banda consiguió revertir parte de esa crítica que había recibido en su entrada por aplausos en sus internadas y apariciones. Unos minutos que refuerzan la intención de conseguir ser importante en el Atlético y que presentan a Simeone un nuevo perfil que no tenía en los primeros meses de competición.
Un intermedio entre Reinildo, todo un portento físico y seguro en defensa, capacitado para jugar en la línea de tres centrales y Carrasco, carrilero de llegada y regate. Con Reguilón hay también un lateral ofensivo para jugar en defensa de cuatro y que destaca por su buena técnica para combinar, centrar y llegar por su banda. En un mercado invernal donde priman las salidas antes que las llegadas, la recuperación completa de Reguilón es una de las buenas noticias para Simeone en este inicio de año.