Óscar amenaza de nuevo
El medio recupera galones ante el rival de su histórico golazo de falta en 2020. Las bajas en ataque del Leganés deberían darle protagonismo. La Real, con dudas y fatiga.
La mirada fija y el corazón, en el estómago. Los casi 11.000 espectadores que abarrotaban Butarque esa fría mañana de febrero (2 del 2, como el marcador en ese momento) aguantaban así la respiración. Entre el infarto y la esperanza. Minuto 94. Falta peligrosísima en la frontal del área de la Real. Y el partido, en sus botas.
Óscar Rodríguez tenía entonces sólo 21 añitos. No había sido titular. Salió en el 80′, pero sabía que era su momento. Catorce minutos después, el mismo número que goles ahora le han convertido en el máximo artillero histórico del Lega en Primera, podía fabricar historia. Por eso hizo mudanza y, al contrario que los pobladores del estadio, no dejó que el corazón invadiera su estómago, sino que lo artilló en su bota derecha. Resoplido, carrera y estruendo. El alarido de festejo se escuchó hasta en Donosti.
Gol. Golazo por la escuadra para dar la victoria (3-2) a un famélico Lega que, a un mes y medio del confinamiento, soñaba con la permanencia. No se logró. Y aun así, aunque han pasado casi cinco años, aquel sigue siendo uno de los momentos cumbre de la historia de los pepineros en la élite. Recuerdo dulce que hoy salta al primer plano porque él, Óscar, está de vuelta. Al sur de la capital regresó en verano. Ahora el retorno se consolida en el once titular de un equipo rasgado en ataque (sigue el partido en directo en AS.com).
La enfermería regala dramatismo, con Raba y Brasanac lesionados, Haller ausente (y también lesionado) y Miguel, listo, pero malherido. Así que, para recibir a la Real Sociedad (14:00), Borja Jiménez seguramente tenga que tirar de él, un Óscar desaparecido hasta la visita a Vitoria, cuando le devolvió la titularidad y él lo agradeció con un buen partido y otro gol.
Repetir la gesta de 2020 frente a la Real será complicado, pero no imposible, insisten al sur de la capital, frente a un contrario capicúa en el esfuerzo con los madrileños. Como ellos, su partido de Copa ante un rival menor necesitó de 120 minutos. Claro que los txuri-urdin jugaron un día después. Menos descanso. También malas sensaciones tras caer en el derbi, la única derrota en los últimos seis partidos. El resto fueron victorias.
Oskarsson y Turrientes se lo pierden. A cambio, Aguerd, Kubo, Zubimendi y Zubeldia retornan tras el descanso copero. Oxígeno para un equipo al que Butarque se le suele enredar entre las piernas: dos derrotas en cuatro visitas en Liga. Una de ellas, la de aquella fría mañana que Óscar calentó los corazones de 11.000 pepineros.
Haller, en el pozo
Haller se ha vuelto a romper. El delantero estrella de los pepineros lo jugó todo ante el Estepona (120 minutos) y acabó siendo pasto de una enfermería que no deja de visitar. Su estado físico le está complicando rendir como le gustaría, como él mismo admitió esta semana en Eurosport Francia.
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