Orden de alejamiento de 1 Km contra los detenidos por el muñeco de Vinicius
La jueza les deja en libertad pero con prohibición expresa de acercarse al jugador, a los estadios Bernabéu y Metropolitano y con cargos por delito de odio. La magistrada aplica todas las medidas propuestas por la Fiscalía de Madrid
La magistrada del Juzgado 26 de Madrid ha puesto en libertad a los cuatro detenidos (tres de ellos con antecedentes) por colgar un muñeco con la camiseta de Vinicius en un puente próximo a Valdebebas en la madrugada del pasado 26 de enero, en vísperas del derbi entre el Atlético y el Real Madrid. Los cuatro detenidos han sido acusados formalmente de un delito de odio y la jueza ha atendido todas las medidas propuestas por la Fiscalía de Madrid, que ha conseguido la orden de alejamiento de los acusados con respecto a Vinicius y a todos los estadios de fútbol de Primera.
A los cuatro detenidos se les atribuye un delito de odio y otro delito contra la integridad moral, si bien esta calificación es inicial y podría verse modificada según se vayan practicando las correspondientes diligencias de investigación en el marco de la instrucción judicial.
Como medidas cautelares, la magistrada ha impuesto primeramente a los cuatro investigados la prohibición de aproximación y comunicación con el propio jugador Vinícius. Además, se les ha impuesto la prohibición de aproximarse a menos de 1.000 metros de la ciudad deportiva del Real Madrid, en cuyas proximidades sucedieron los hechos investigados. En tercer lugar, también se les ha impuesto la prohibición de aproximarse a menos de 1.000 metros de los estadios Santiago Bernabéu y Civitas Metropolitano, así como de todos y cada uno de los estadios de La Liga durante la celebración de los encuentros de fútbol de dicha competición, conforme al calendario establecido por sus organizadores. En concreto, se les prohíbe la aproximación a todos esos recintos deportivos desde cuatro horas antes del inicio del partido señalado por la competición hasta cuatro horas después de su finalización.
Todos los detenidos se han negado a declarar ante el juez, que ahora deberá fijar fecha para el juicio. El Código Penal contempla penas de hasta 4 años de prisión para los delitos graves de odio.