Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ATLÉTICO DE MADRID

Onyedika, de pedir para comer a anular el centro del campo del Atleti

El nigeriano es uno de los baluartes del Brujas, el pulmón de su centro del campo y uno de los talentos emergentes más prometedores de Europa. Su historia realza el valor de sus conquistas.

Onyedika, ante el Atlético.
Soccrates ImagesGetty

Raphael Onyedika es uno de los jugadores más prometedores de Europa. A sus 21 años, el de Imo State (Nigeria) ha llamado la atención de medio continente con sus actuaciones en Champions, escaparate sin igual para cualquier futbolista. Sin embargo, hasta llegar al punto en el que se encuentra hoy, el joven mediocentro ha tenido que superar muchos obstáculos. Según ha contado en más de una ocasión, pertenecía a una familia humilde que, con frecuencia, se veía obligada a pedir comida para sobrevivir. “Es algo difícil para un niño”, reconoció el nigeriano en una entrevista para Het Laatste Nieuws.

Pese a ello, su pasión por el fútbol era tal que, sin televisión en casa, veía los partidos en la de los vecinos por la ventana. Esos encuentros en los que hoy es protagonista, hace apenas unos años los seguía de forma casi clandestina. Todo un hito atendiendo, además, a su tardía incorporación a este deporte. Sin haber pasado previamente por ningún equipo, con el fútbol callejero como único aprendizaje, el actual jugador del Brujas se unió a los 15 años a la academia del F.C. Ebedei, equipo perteneciente a la tercera categoría del fútbol nigeriano, pero no fue hasta los 18 cuando su potencial llevó al F.C. Midtjylland danés a firmarle. Su evolución allí fue meteórica. En su primera temporada su buen hacer en la UEFA Youth League le llevó a firmar su primer contrato profesional con el equipo rojillo y le sirvió para recalar en el F.C. Fredericia de la segunda categoría danesa, como cedido.

Nuevamente, su gran año, con 28 partidos jugados y tres goles anotados, no pasó desapercibido para el Midtjylland, que al término del ejercicio le reclutó para su primer equipo y le aseguró con un contrato de cinco años. No fue suficiente. Tras completar allí una temporada, la 21-22, en la que se convirtió en un fijo del centro del campo (48 encuentros en su haber), este verano el Brujas pagó diez millones para hacerse con sus servicios. Pues bien, a tenor de lo demostrado en lo que va de campaña, la jugada no puede haberle salido mejor al conjunto belga. Se ha hecho con las riendas del centro del campo hasta el punto de desaparecer del once tan solo una vez desde que llegó.

El motor del Brujas

Aterrizó en Brujas el 28 de agosto, con la competición local ya empezada, y fue titular en cuatro de los siguientes cinco partidos ligueros. En Champions, más de lo mismo. Se ha perdido solo siete minutos en lo que va de fase de grupos, los últimos del primer encuentro ante el Leverkusen, y le ha dado al elenco de Hoefkens la estabilidad y consistencia que todo equipo que quiere ser competitivo en Europa necesita. Ante el Atlético, confirmó las buenas sensaciones transmitidas durante el inicio de curso, se hizo dueño del centro del campo y fueron muchos aquellos a quienes les recordó a la mejor versión de su ídolo, Paul Pogba.

En cada partido que juega demuestra un poderío, tanto en defensa como en ataque, que acompaña de una habilidad inusitada para su altura. Este miércoles tiene la oportunidad de refrendar todo lo demostrado y asegurar la clasificación de su equipo a octavos de final, algo histórico para el club belga. Con la lección ya aprendida, Simeone deberá encontrar la fórmula de aminorar su impacto.