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COPA DEL REY JUVENIL

Nico Paz lleva al Madrid a la final

El Juvenil de Arbeloa elimina al Athletic en semifinales de la Copa del Rey con un golazo del argentino y otro de Ander en propia puerta. La final, este sábado en León.

Nico Paz y sus compañeros del Juvenil celebran el 1-0 al Athletic.
Nico Paz y sus compañeros del Juvenil celebran el 1-0 al Athletic.

El Juvenil del Real Madrid estiró su racha sin perder a 34 partidos y se mete en la final de la Copa del Rey a base de sacarle jugo a la enorme remesa de talento con la que cuenta Arbeloa. Un golazo del internacional argentino Nico Paz culminando una acción tremenda coral con las puntadas de David Jiménez y Pol Fortuny lleva al Madrid a estar en el encuentro por el título. Será este sábado, a las 16:30 horas en el Reino de León, contra el vencedor del Deportivo-Almería.

Una tarde feliz para un equipo que es feliz. El Juvenil A madridista corre sin frenos a por el triplete. A esta final de Copa suma su pase la semana pasada a cuartos de final de la UEFA Youth League y de momento lidera el Grupo V de División de Honor que le daría el pase automático a competir de la Copa de Campeones que determinará qué equipo Juvenil es el mejor de España esta temporada. Y por calidad no anda corto. El Athletic de Bittor Llopis planteó un partido inteligente y consiguió sostener el poderoso ataque blanco (Gonzalo, César Palacios y Fortuny) que puebla las listas de la Sub-19 española. Olabarrieta intentó alimentar ofensivas para Txus Vizcay, el tanque rojiblanco. Con todo, el Madrid dispuso de un goteo incesante de ocasiones, gracias a Yusi, pero Mikel Santos, león bajo palos, evitó varios goles madridistas.

El paso por el descanso dio pie a un Athletic más desenfadado en la segunda parte, reforzado en su idea de que estaba contrarrestando bien las virtudes madridistas, y de hecho Piñeiro tuvo que aparecer más que nunca en esos primeros diez minutos de la segunda mitad. Un paso adelante que condujo el partido a un ida y vuelta del que Nico Paz sacó tajada y que terminó de hundir al Athletic en un gol en propia puerta de Ander Fernández cuando quiso despejar una pelota de David Jiménez que iba dentro. Ni el movimiento de Llopis de incluir a Asier Hierro, que se fajó como un titán con un enorme Jacobo para manufacturar un par de buenas ocasiones rojiblancas, pudo ejercer como catalizador de una posible remontada.

El Juvenil blanco certificó ante un buen Athletic el porqué de su condición de gran favorito en esta Copa y de equipo a batir allá donde va. Arbeloa está a punto de engarzar el primer diamante en la corona de una de las generaciones de La Fábrica más excitantes en bastante tiempo.