Nahuel Molina alivia a Llorente
Con la llegada del lateral argentino, Llorente podrá despreocuparse por fin del carril derecho y volver a centrarse en el centro del campo, donde encontrará mucha competencia.
El fichaje de Nahuel Molina por el Atlético de Madrid ha sido un secreto a voces durante todo el verano y aunque la operación ha sido un tira y afloja constante, con otros nombres como el de Semedo, Aurier o Juranovic de por medio, parece que está a punto de cerrarse a cambio de algo más de 10 millones y Nehuén Pérez, quien aún debe cerrar su contrato con el Udinese. Tal es así que el argentino ha llegado esta tarde al aeropuerto de Barajas para realizar las pruebas médicas y unirse mañana a la expedición del Cholo, que en dos días se enfrentará al Numancia.
Su llegada cierra definitivamente la cuestión del lateral derecho, pero abre una incógnita nueva: Marcos Llorente y su posición en el campo. Durante la temporada pasada, su papel dentro del equipo se vio muy limitado por su disposición en el verde, y es que Simeone decidió sacrificarlo para cubrir el flanco derecho, y más con la salida de Trippier al Newcastle, situación sin duda acrecentada además por el fichaje de Rodrigo de Paul, que lo jugó prácticamente todo, provocando que Marcos perdiera protagonismo.
Por todo ello, el madrileño tan solo cosechó dos asistencias entre todas las competiciones de la temporada pasada, sus peores números desde que llegó al Atleti. Ahora, todo apunta a que volverá a su demarcación original, tanto por la llegada de Nahuel, como por las sesiones de entrenamiento durante la estancia de los rojiblancos en Los Ángeles de San Rafael, donde Simeone ha preferido probarle en el medio y en el interior derecho.
El centro del campo, un puesto demasiado cotizado
La intención del técnico argentino pasa por resucitar la mejor versión de Llorente, que, jugando entre los centrocampistas y los delanteros, logró anotar trece goles y repartir otras trece asistencias en la 20-21, cuando el Cholo dejó de usarlo de pivote y adelantó su posición en aquel 3-5-2 que tan buen resultado le dio y acabó con el título de Liga. La mala noticia para él es que la pérdida de galones en el medio, sumada a la reincorporación de Saúl y al fichaje de Witsel, puede complicar la conquista de un puesto titular en el once.
Así, en caso de que el Cholo prefiera mantener el sistema de tres centrales, Llorente deberá competir con Koke, Saúl, de Paul, e incluso Lemar por dos puestos en el medio del campo, contando con que Kondogbia o Witsel ocupen la posición de pivote. Si, por el contrario, Simeone prefiere jugar con cuatro atrás, Llorente también tendrá la baza de ocupar el interior derecho, pero donde mejores números fraguó, fue jugando en una posición más adelantada y centrada. Con todo, aún habrá que esperar unos días para ver la auténtica apuesta del Atlético de Madrid esta temporada, pero de lo que no cabe duda es que Marcos Llorente tratará de redimirse y de alcanzar de nuevo el nivel que le hizo fijo en las alineaciones del Cholo.