Montoya, salvación de Pellegrini
El lateral diestro es la única baza del Betis para el lateral derecho en el partido ante el Espanyol por las bajas de Sabaly y Aitor Ruibal. No juega desde inicios de octubre.
Sólo 186 minutos disputados en esta Liga y una última aparición que data del nueve de octubre. Pero es la baza convertida en esperanza de Manuel Pellegrini de cara al duelo del próximo sábado ante el Espanyol. Es Martín Montoya y todo apunta a que será el elegido para ser el lateral derecho del Betis en su próximo envite liguero. El jugador debe ser de la partida ante las ausencias de Youssouf Sabaly y Aitor Ruibal. El primero está lesionado. El segundo cumplirá sanción. Es su turno cuando quizás pocos pensaban que podía tener de nuevo un peso en este equipo. “Siempre se ha entrenado bien con nosotros y trabaja para jugar. El problema es que tanto Sabaly como Ruibal lo estaban haciendo bien hasta ahora”, explica Pellegrini.
Montoya no estuvo presente en la cita ante el Cádiz debido a un proceso febril. Pero el club confía en que esté de vuelta estos días para que cumpla su función en el carril diestro debido a las obligadas bajas. Pellegrini lo mantuvo en su plantel desde el inicio de la campaña al no poder encontrar el jugador una salida que fuera satisfactoria para todas las partes. La competencia minimizó su protagonismo y no juega desde que lo hiciera en octubre ante el Valladolid en un duelo que terminó con tablas sin goles. Ahora debe dar un paso adelante y demostrar que sigue teniendo el fútbol que siempre tuvo. Al menos para rendir en ese carril derecho que tanta necesidad crea en el plan inmediato de Pellegrini.
Sabaly se lesionó con la selección de Senegal en el último parón y se está a la espera de que pueda acelerar su puesta a punto. No será fácil y nadie quiere arriesgar con un futbolista que puede ser vital en el tramo final de Liga. Montoya tiene contrato con el Betis hasta el verano de 2024. Su papel en esta campaña está siendo secundario e incluso se quedó fuera de la lista para la Europa League en el inicio de la campaña. Su rendimiento, eso sí, respondió a las expectativas del técnico cuando tuvo la oportunidad de tener minutos sobre el terreno de juego. Ante el Espanyol, es la salvación de Pellegrini.