Una roca sobre la que edificarse
El Atlético es el equipo de Primera que menos goles encaja (0,55 por partido) pese al calendario. Casi la mitad que el curso pasado... pero nueve menos a favor.
EI Atlético se ha marchado al parón con malas sensaciones tras cerrar sus tres últimos partidos con dos empates ligueros y una derrota en Champions. Pero tiene algo a lo que agarrarse. El golazo de Sucic tras una pérdida de De Paul rompió la red de Oblak después de haber sostenido con solvencia el asedio de la Real Sociedad gracias al buen nivel del guardameta y de una zaga que responde a pesar de las bajas.
Ni las ausencias de Llorente y Le Normand impidieron mostrar un buen rendimiento de la retaguardia, que viene siendo lo mejor del curso para los rojiblancos. Nahuel Molina mejoró en banda, Lenglet se estrenó a buen nivel, Giménez tiene la continuidad que siempre le ha faltado, Javi Galán suma, Witsel da garantías y Oblak está en muy buena versión. Aquello de la manta corta, si hace un año se desangraba atrás e invalidaba los buenos números ofensivos, en este nuevo curso la falta de gol penaliza a una defensa que vuelve a sus números de antaño.
El Atlético ha recibido cinco tantos en las nueve primeras jornadas de Liga. Pese al calendario, visitando a Villarreal, Athletic, Real Sociedad... y recibiendo a Real Madrid y Girona entre otros, el Atlético encaja 0,55 tantos por encuentro. El mejor equipo de Primera, por delante de Real Madrid (seis) y Getafe (siete). Unos números que pueden permitir a Oblak soñar con pelear por su sexto Zamora, lo que le convertiría en el portero más laureado de la historia superando a Víctor Valdés y Ramallets. Eso sí, el 0-1 de San Mamés fue con Musso bajo palos por encontrarse el esloveno indispuesto. Muchos de los triunfos rojiblancos se explican desde la contundencia defensiva.
Puntero
En las grandes ligas, solo la Juventus (uno), el Liverpool (dos), Empoli (cuatro), Mónaco (cuatro) y Lens (cuatro) lo mejoran en siete jornadas. Y el Leipzig (dos) y Union Berlín (cuatro) en seis. Todos todos con menos partidos. Echando la vista atrás, en las nueve primeras jornadas de la temporada pasada (el Atlético jugó antes la 10 que la cuatro por aplazarse el encuentro ante el Sevilla) el equipo rojiblanco había encajado nueve tantos, casi el doble que en la actualidad. Una mejoría enorme y una buena noticia dentro del pesimismo que dejó el momento de forma previo al parón.
En contraposición, en sus nueve primeros partidos de Liga marcó 22 goles por los 13 actuales, aunque el 0-7 al Rayo engordó la estadística. “Yo veo al equipo muy fuerte desde lo defensivo, ordenado. Necesitamos mejorar en las transiciones porque tenemos jugadores para crecer esa parte del juego que nos está costando”, reconocía Simeone. Al equipo le falta fútbol. Generar juego ofensivo. Y es en lo que se concentra durante el parón. Atrás ha recuperado su muro. La roca sobre la que edificarse.
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