“¿Manolo? Si hasta se cuestiona a Ancelotti con el Madrid líder...”
En forma se muestra Edu Expósito justo un año después de su rotura del cruzado y ante la visita de los blancos, “totalmente diferentes sin Kroos” a un Espanyol para el que “un empate será oro”.
Rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. El diagnóstico que un futbolista no quiere oír nunca lo recibió Edu Expósito (Cubelles, 01-08-1996) tras lesionarse el 28 de enero de 2024. Y le tocó morderse las uñas en todo el proceso de ascenso del Espanyol.
Esta semana se ha cumplido un año de aquel ‘crac’ en el Pepico Amat de Elda, que ha coincidido con su titularidad y además con el brazalete de capitán el miércoles, en la Copa Catalunya frente al Sabadell, y ahora con todo un Espanyol-Real Madrid para saciar su sed de futbolista y futbolero “loco”.
Un año de su lesión. ¿Cómo se encuentra?
Ahora mismo estoy en el camino de ir recuperando sensaciones, confianza, rodaje, de sumar minutos, y el míster me los está dando.
¿Es mucho más complejo entrar en el minuto 60 que hacerlo de inicio?
Cambia mucho, porque los jugadores que están sobre el césped ya llevan un ritmo y, por mucho que hayas calentado, el tuyo no tiene nada que ver. Hay mucha más sensación de agobio.
¿Cuántas veces habrá visualizado su primera titularidad en LaLiga tras un año lesionado?
Uff… Visualizo cada día las sensaciones que tenía antes de lesionarme, cuando me encontraba bien, cómodo, físicamente aguantaba los 90 minutos. Visualizarlo creo que me ayuda a encontrarlo más pronto, después de tanto tiempo.
“Visualizo cada día las sensaciones que tenía antes de lesionarme”
Su convalecencia
Después de una rotura del cruzado, ¿uno vuelve ni que sea inconscientemente con más miedo?
Miedo no he tenido nunca a meter el pie. Sí que hubo un pequeño retraso, porque por una acción tonta durante un entrenamiento se me volvió a hinchar y me tuvieron que sacar líquido. Y ahí sí que planteé que como fuera a ser así siempre lo iba a pasar muy mal. Pero no. La rodilla ha seguido funcionando muy bien, se tiene que acostumbrar al fútbol de elite porque no es lo mismo entrenar que competir contra los mejores. En eso justo estoy ahora.
¿Cómo de decisivo ha sido, en la lesión, contar con la figura de un ‘coach’?
Esa ayuda y refuerzo han sido fundamentales, porque en la lesión ha habido altibajos. Cuando te crees que estás bien, al día siguiente empeoras, así son las lesiones de rodilla. El ‘coach’ ya me ayudaba cuando jugaba, cuando tenía menos minutos o si los resultados no acompañan.
Debió de ser insufrible seguir toda la lucha del Espanyol por el ascenso desde la grada, ¿no?
No se lo puede ni imaginar… Fue muy de agradecer que me dejaran viajar con el equipo a todos los partidos desde que pude caminar bien, porque a mí me gusta vivirlo todo muy de cerca. Lo disfruté enormemente, pero también sufrí muchísimo con todos esos empates que en aquel momento parecía que no servían de nada, aunque luego sí.
“Un empate contra el Madrid será oro... aunque ganar sería la leche”
El Espanyol-Madrid
¿Lo de los empates es equiparable a lo que les sucede ahora?
Totalmente. En esta categoría, todo lo que sea sumar lo vamos a agradecer. El punto del Sevilla es espectacular, y si conseguimos un empate contra el Madrid será oro para nosotros… aunque ganar sería la leche.
Hablando del Madrid, qué mal momento para enfrentarse a Mbappé, ¿no?
Ojalá no tenga su día. Pero ni Mbappé ni el resto: son los mejores jugadores del mundo y por eso están en el Madrid, un equipo campeón. Tenemos que estar muy precisos defensivamente y buscar una de esas acciones que estamos teniendo últimamente a balón parado para poder hacerles daño, ponernos por delante e intentar aguantar el resultado.
Como metrónomo que es del Espanyol, ¿cree que se había subestimado lo fundamental que era la figura de Kroos en el Madrid?
Como se ha visto, lo difícil es hacerlo tan fácil como lo hacía Kroos. Es un tipo de jugador tan importante que al Madrid le cuesta un poco, que no tiene esa creación y le falta esa pausa que sí tenía antes, pero ahora va a por todas, a por los partidos, y es un equipo totalmente diferente, es otro.
“Sin Kroos, el Madrid es un equipo totalmente diferente”
De metrónomo a metrónomo
Esa pausa, salvando las distancias, ¿le está faltando también a un Espanyol que conserva muy poco el balón?
Es que no se puede atacar todo el rato, ni tampoco estar todo el tiempo defendiendo. Sin un equilibrio es imposible. Además, haciendo continuamente transiciones te mueres físicamente. Creo que el equipo está encontrando en esta segunda vuelta ese punto positivo, ahora nos tienen que seguir acompañando los resultados.
¿Cómo convive Manolo González con un ‘match-ball’ semanal?
Los entrenadores están acostumbrados a estar en la cuerda floja, vaya bien o mal. Si algunos están cuestionados hasta cuando van las cosas bien, como el propio Ancelotti, que tiene al Madrid líder y clasificado en Champions....
“Algunos entrenadores están cuestionados hasta cuando las cosas van bien, como Ancelotti”
Los banquillos
A propósito de ello: ¿es usted jugador de ver mucho fútbol, o de los que desconectan?
Soy un loco por el fútbol. Me encanta verlo todo, aunque al tener ahora un niño pequeño puedo un pelín menos. Aun así, siempre estoy pendiente de los partidos, los resultados, los fichajes… de todo.
Y tiene el primer nivel de entrenador, ¿verdad?
Tengo los dos primeros niveles, porque en el futuro me gustaría ser entrenador. Espero que quede mucho para eso, cuando me retire.
¿Ve a Manolo bien, pues?
El míster está tranquilo, dentro del reto bonito que tiene por delante. Yo creo que hay que darle valor a lo que consiguió el año pasado, el ascenso. Para nosotros es una pieza fundamental. Yo a él se lo he dicho personalmente: Manolo es el entrenador del futuro. El Espanyol tiene que conseguir que esté tres, cuatro o cinco años, porque será la forma de lograr una buena estabilidad que el club no estaba consiguiendo. Y eso es clave.
“Manolo es el entrenador del futuro, el Espanyol tiene que conseguir que esté tres, cuatro o cinco años”
Confianza en el técnico del Espanyol
Por cierto, en nada se parecerá esta previa contra el Madrid a la que vivió como jugador del Eibar en 2020, ¿verdad?
(Ríe) Ya lo creo. Teníamos que jugar en el Bernabéu en marzo, pero el Gobierno y LaLiga decretaron la paralización de LaLiga y el Madrid aprovechó la pandemia para acelerar las obras del estadio. Así que, tres meses después, nos tocó jugar en Valdebebas. Fue nuestro curioso retorno al fútbol.
Ya suma más partidos en Primera, 102, que en Segunda. ¿Los podrá seguir sumando la próxima temporada?
Esa era mi idea cuando fiché por el Espanyol. Aunque en el Eibar y el Deportivo había jugado en Primera, llegué a un sitio donde asentarme muchísimos años en Primera… y justo descendemos. Pero ahora que hemos vuelto no tenemos otro objetivo que mantener la categoría y hacernos un club fuerte, como el Espanyol lo ha sido siempre.
Cuando fichó, en el verano de 2022, dijo que venía a hacer “algo bonito” con el Espanyol. Estaban Joselu, Darder, Braithwaite, incluso Raúl de Tomás aún… ¿Le ha decepcionado la deriva que han tomado el equipo y el club en tan poco tiempo?
La desilusión es haber bajado a Segunda, no tanto qué jugadores somos o no haber ido hacia arriba. Venía con esa intención de participar de un proyecto con el que estar muchos años en Primera, y se truncó en solo unos meses con el descenso.
“La desilusión es haber bajado a Segunda, no tanto qué jugadores somos”
El Espanyol de ahora respecto al de 2022
El actual deportivo, Fran Garagarza, le fichó para el Eibar, y ahora coinciden en el Espanyol. ¿Cómo es en las distancias cortas?
Conmigo es una persona muy cercana, al conocernos desde hace mucho tiempo. Pero a la vez mantiene sus distancias y ‘timings’ porque no deja de ser un director deportivo, y hace su trabajo.
¿A usted cómo le convenció para irse al Eibar?
Vino una vez a A Coruña a verme, me explicó su intención, y yo la mía, que pasaba por quedarme sí o sí en el Depor si subíamos a Primera. Era mi ilusión. No se dio, vino a por mí con fuerza y pudieron las ganas de jugar en Primera.
Como exjugador del Eibar, ¿qué le parece que parte de la afición diga que el Espanyol se está ‘eibarizando’?
Bueno, será porque Pere Milla, Tejero y yo estuvimos allí, lógicamente también Fran. Eso no es ni bueno ni malo.
Me da a mí que la expresión va más encaminada al perfil de los refuerzos en los dos últimos años…
La cuestión aquí, más allá de los nombres, es dar un buen rendimiento en el terreno de juego y aportar tu granito de arena en el vestuario. Cada uno tiene su rol.
De los refuerzos que han venido, Pablo Ramón está precisamente convaleciente de una rotura del cruzado, como la suya. ¿Han hablado?
Le quedan unos meses para poder competir, espero que los menos posibles. Él está muy ilusionado porque viene a un club muy grande, que será importante en su carrera.
¿Tiene ganas de intentar ya esos chuts desde fuera del área tan suyos?
La verdad es que sí. Ojalá pronto pueda meter goles y me pueda encontrar a mi nivel, también dando asistencias.
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