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LALIGA EA SPORTS

Los cambios de banquillo no surten el efecto deseado en LaLiga

Villarreal, Almería, Sevilla y Granada han apostado por nuevos entrenadores en la primera vuelta, pero apenas han conseguido mejorar puestos en la tabla clasificatoria.

Actualizado a
Gaizka Garitano.
Jesús DigesEFE

Esta temporada, cuatro han sido los banquillos de LaLiga EA Sports que han tenido movimiento en la primera vuelta, alguno de ellos, como Sevilla y Villarreal, van por el tercer técnico de la temporada. Almería y Granada sólo han realizado un cambio en el banquillo, pero en todos los casos no se ha producido la mejora deseada, el mito futbolístico de “entrenador nuevo, victoria segura” esta temporada no ha funcionado en casi ningún caso. El Villarreal es el único que ha mejorado dos puestos, pero sigue coqueteando con el descenso. Los puestos que dan billetes al ‘infierno’ los tiene a cuatro puntos.

Precisamente, el equipo amarillo fue el primero que movió. En la cuarta jornada, Quique Setién fue destituido con el Villarreal en la decimoquinta posición y su sucesor, Pacheta, lo dejó en la posición decimotercera, tras ocho jornadas. Tras el paso fugaz de Tena, como técnico interino durante una jornada, la llegada de Marcelino no ha empeorado la situación clasificatoria, pero tampoco la ha mejorado en los cinco partidos que ha dirigido. Tras la primera vuelta, el equipo se mantiene como 13º.

El segundo entrenador que salió fue Vicente Moreno, el Almería prescindió de él en la séptima jornada. Tras la marcha del técnico el equipo indálico estaba colista y esa posición sigue doce jornadas después, ni los dos partidos que dirigió el interino Lasarte, ni la llegada de Garitano han conseguido que el equipo haya remontado el vuelo clasificatorio. Si bien es cierto, que en el caso de los almerienses las lesiones de jugadores importantes de ataque han condicionado el efecto de los técnicos.

El Sevilla de esta temporada también está dentro de una vorágine que se ha llevado tres entrenadores. Mendilibar, el que les subió al cielo de la Europa League en la 22-23, aguantó nueve jornadas y dejó al equipo de Nervión en la posición decimocuarta. Tras el vasco llegó una apuesta arriesgada, Diego Alonso, y resultó un desastre. El técnico uruguayo dejó al equipo sevillista al borde del descenso: decimoséptimo. La llegada de Quique le ha dado un poquito de oxígeno, pero no remonta hasta el puesto que lo dejó Mendilibar. Si bien es cierto que solo lleva dos partidos y los rivales han sido de enjundia: Atlético, en el partido aplazado de la jornada 4, y el Athletic. Ha terminado la primera vuelta en la decimosexta posición.

El equipo que más ha tardado en perder la confianza en su entrenador fue el Granada. Paco López ha dirigido al equipo de Los Cármenes durante catorce partidos, pero lo dejó penúltimo. El recambio fue el Cacique Medina, pero en cinco partidos no ha conseguido sacar al equipo de las posiciones de descenso y sigue segundo por la cola.

Estos cuatro equipos no han conseguido el revulsivo que esperaban con el cambio de entrenador. Celta, Cádiz, Alavés y Mallorca también son equipos que están en la zona peligrosa y apuestan por la continuidad de sus técnicos. Viendo los resultados que han tenido aquellos equipos que optaron por dar un cambio de rumbo en el banquillo, es probable que se lo piensen, de momento.

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