Lim frena la cesión de Marcos André, quiere traspaso
Las llegadas de Amallah o Canós están también paralizadas hasta que se consiga dar salida a Castillejo, Racic o el propio delantero brasileño.
La salida de Marcos André del Valencia y su llegada al Real Valladolid está frenada por Peter Lim. El principio del acuerdo a tres bandas está hablado desde hace dos semanas, si bien, la operación estaba y sigue pendiente del OK del máximo accionista del club de Mestalla, que no está por la labor de una cesión del delantero y quiere un traspaso. De ahí que el brasileño continúe ejercitándose en Paterna, aunque Baraja haya dejado claro que no cuenta con él ni tampoco el futbolista tiene intención de estar esta temporada en Mestalla.
La cesión de Marcos André, tras la negativa del Valencia a aceptar la propuesta del Alavés y la del jugador de salir de España, se contemplaba como una fórmula con la que intentar revalorizar a un jugador que desde que llegó a Mestalla solo ha marcado cuatro goles en partidos oficiales. El Valladolid asumía su ficha y el Valencia la amortización anual de su fichaje, del que aún resta por amortizar 5,1 millones. Precisamente con miras a tratar de recuperar con el tiempo parte de lo pagado en su traspaso, en el Valencia se veía con buenos ojos que recalase en un club que Marcos André conoce y que será uno de los punteros de la categoría de plata. Pero Lim no aprueba su cesión y de ahí que la operación no se haya cerrado.
Con el Valladolid también estaba pactada una cesión a la inversa, la de Selim Amallah rumbo a Mestalla. La operación está prácticamente rota porque el Valladolid sí vinculaba la operación a la de Marcos André, es decir, no es un trueque al uso, aunque el salario del mediocentro ofensivo marroquí le encajaría al Valencia si se liberase de la ficha de Marcos André. Pero su llegada como la de cualquier otro futbolista en el radar blanquinegro, llámese Sergi Canós, está bloqueada también por Lim hasta que el club materialice las salidas de Castillejo, Racic o el propio Marcos André. Y todo ello a cuatro días del debut del Valencia en Liga contra el Sevilla en el Sánchez-Pizjuán.