Layhoon tiene cita el viernes con Joan Ribó y Sandra Gómez
La reunión estaba prevista que fuera por videollamada, aunque la ejecutiva de Meriton Holdings intenta adelantar su llegada a Valencia para asistir presencialmente.
El Valencia, como desveló AS, presentó con fecha de 25 julio el proyecto modificado del nuevo estadio, en el que se incluían los cuatro puntos acordados con el Ayuntamiento de Valencia para iniciar los trámites de licencias y reanudación de obras. Ahora, una vez presentado el documento y tras el estudio de los técnicos municipales, Layhoon Chan, mano derecha de Peter Lim, tiene cita este próximo viernes con el alcalde Joan Ribó, la vicealcaldesa y responsable de urbanismo Sandra Gómez y con la concejala de Actividades Lucía Beamud, que es el área encargada de tramitar las licencias.
La reunión estaba prevista que se produjera por videollamada, aunque Layhoon Chan trata de llegar hoy a España. La ejecutiva de Meriton Holdings, ex presidenta del Valencia tenía programado estar en Valencia el 1 de agosto, si bien, quería adelantar el viaje para acudir presencialmente a la cita en el Ayuntamiento. Todo ello para, en caso de que los informes de los técnicos municipales sean positivos, agilizar los trámites de licencias y otros pormenores con las empresas constructoras, un periodo que se estima en seis meses.
El Valencia ha presentado un proyecto modificado en el que se incluye el aforo de 66.000 espectadores, que el Ayuntamiento tratará de que pueda llegar a ser de 70.000 en caso de necesidades de la ciudad, y otros acuerdos como la ejecución por parte del consistorio del Polideportivo de Benicalap, con pago a cuenta del club, la implicación del Valencia con miras a la instalación de una cubierta con placas solares que suministre energía al recinto y también un porcentaje al barrio y la inauguración del estadio en 2025.
A la espera de la reunión, el Consell Juridic Consultiu emitió en la tarde un informe en el cual dictamina que la ATE de Mestalla debe ser resuelta y caducada anticipadamente. Ello implica que mantener las ventajas urbanísticas de la ATE pueda depender de un nuevo convenio, que suscribiría el Valencia con Urbanismo.