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BARCELONA

La renovación de Ter Stegen como mini-palanca

Después de un año de conversaciones, el Barça espera cerrar antes del 31 de agosto una ampliación del contrato que le permitirá abrir espacio salarial para la inscripción de jugadores.

Ter Stegen, el pasado domingo en el Coliseum de Getafe.
JAVIER SORIANOAFP

“No hay noticia; cuando la haya, se comunicará”, dijo este verano Marc-André Ter Stegen en el Memorial Coliseum de Los Ángeles cuando, como recurrentemente, se le preguntó por la renovación de su contrato, que termina en junio 2025 y que, al ser ascendente, como el de Frenkie de Jong, supone una tremenda carga en la masa salarial del club. Por eso, el Barça, después de un año de conversaciones con su representante, René Vom Bruch, y después de una última cita el pasado miércoles, espera anunciar en pocos días la ampliación de contrato del alemán, lo que permitiría abrir espacio salarial para la inscripción de jugadores. El internacional alemán diferirá las cantidades de su contrato como ya hizo en su última ampliación.

Ter Stegen es junto a Frenkie de Jong, Piqué y Lenglet uno de los cuatro miembros del ‘club de 2020′ que, apretados por el club para ahorrar masa salarial de manera inmediata por la crisis generada por los efectos del COVID-19, accedieron a ampliar sus contratos difiriendo los pagos. Eso fue en octubre del mencionado 2020. El Barça de Laporta, sin embargo, deslizó el verano pasado que esas renovaciones tenían un sobrecoste envenenado para el club de más de 300 millones de euros, una cantidad que multiplicaba por diez el ahorro que para la Junta de Bartomeu habían significado esas renovaciones.

Así que el Barça se puso a funcionar y aseguró que veía indicios de “criminalidad” en las renovaciones de los cuatro futbolistas, por lo que pidió al ‘club de 2020′ que regresase a las condiciones contractuales que tenían antes de esas renovaciones. Con Piqué, todo se resolvió con motivo de su retirada en noviembre. En el caso de Frenkie de Jong, hasta se amenazó con llegar a los tribunales. El holandés era el eslabón débil de la cadena porque el Barça creía que lo vendería. Con Ter Stegen se optó por la vía de una negociación que, por lo visto, podría resolverse satisfactoriamente antes del 31 de agosto y permitiría que el alemán liberase parte de su masa salarial. Como capitán, el alemán ha dado un paso para abrir la puerta a la inscripción de jugadores. Quedarán por resolver los contratos de Lenglet, a quien se intenta rescindir (termina en 2026) y Frenkie de Jong, que no está muy satisfecho del trato de la directiva de Laporta el año pasado y será una piedra en el zapato para Deco.