La mano derecha de Mouriño abandona el Celta
Antonio Chaves cierra por sorpresa su etapa como director general tras quince años en el cargo. El presidente quería que lo sucediera transitoriamente hasta que su hija Marian tomara el mando.
Terremoto en el Celta a falta de dos meses y medio para celebrar el Centenario. Antonio Chaves abandona el club vigués tras quince años en el puesto de director general y siendo la mano derecha del presidente Carlos Mouriño. De hecho, el propietario de la entidad olívica consideraba que era la personal ideal para sucederlo transitoriamente hasta que su hija Marian tomara el mando.
“Después de quince años de lucha, identidad y Afouteza, llegó el momento de estar con la familia. Gracias por todo y por tanto. Siempre me he sentido muy apoyado. Desde dónde esté, siempre agradecido... Siempre Celta”, comenta Chaves en el vídeo publicado por el club celeste para anunciar este adiós.
Este abogado de O Grove era mucho más que el máximo encargado de la gestión administrativa del club. Sólo la opinión de Mouriño pesaba más que la de Chaves a la hora de tomar decisiones deportivas. “Tanto Antonio Chaves, como Luís Campos y como yo, vamos unidos y de la mano. Estamos trabajando por el bien del club”, aseveró el presidente el pasado mes de enero en plena tormenta por la polémica marcha de Denis Suárez como cedido al Espanyol.
La sorprendente salida del director general llega días después de que la afición céltica exigiera contra el Barcelona en Balaídos la marcha de Mouriño. Lo sucedido en la grada durante el último partido de Liga dio continuidad a la tensión vivida dentro y fuera del estadio en la anterior jornada disputada en el coliseo vigués. Sin Chaves en A Sede, queda en el aire el proyecto iniciado el pasado verano por el director deportivo externo Luís Campos.