La lucha de Vinicius no para
El futbolista se ha empoderado en su batalla contra el racismo y planea seguirla la temporada que viene. Nike se reconcilia con el jugador y le apoya decididamente a difundir su mensaje de tolerancia cero.
Las muestras de apoyo que ha recibido Vinicius (22 años) en las últimas horas, sobre todo el respaldo del Real Madrid y de su presidente, Florentino Pérez, pero también la toma de decisiones rápidas de las instituciones tras lo sucedido en Mestalla, han reconfortado mucho a la estrella brasileña, pero también le han reforzado en su idea de abanderar esta pelea abierta para terminar de erradicar el racismo en el fútbol. “Su lucha no va a parar”, dicen a AS personas muy cercanas al futbolista, que tiene decidido continuar con esta actitud reivindicativa y de tolerancia cero con cualquier manifestación racista la temporada que viene y, por supuesto, también este verano, empezando por el partido que ha de jugar con Brasil en Barcelona el próximo día 17. Será ante Guinea, y la CBF ya le ha dicho al jugador que ese encuentro servirá como altavoz a sus reivindicaciones.
El joven jugador ha tenido que pasar un calvario esta temporada. La de Mestalla fue la décima denuncia por hechos racistas en la que él fue la víctima, sin que en ninguna de las anteriores se tomaran realmente medidas para atajar el problema. Y lejos de amilanarse, Vinicius se siente más empoderado que nunca en este papel de abanderado de una lucha que sigue activa desde hace décadas. También se siente orgulloso, cuentan desde su entorno más directo, de que haya sido él con sus acciones en el campo y las posteriores manifestaciones en sus propias redes sociales las que hayan despertado por fin la conciencia del mundo del fútbol, en España, sobre este tema. “Nadie ha hablado por él”. Él mismo ha manejado los mensajes a través de las redes. Y también se sintió reconfortado al ver cómo Javier Tebas pedía perdón en una entrevista realizada en Brasil. “A partir de ahora cualquiera que sea indolente con el racismo tendrá la respuesta de Vini”, concluyen.
Aunque a día de hoy su salida de fútbol español no se contempla, como ya informó AS, la realidad es que Vinicius se lo planteó seriamente esta temporada, antes incluso de los incidentes de Mestalla. A pesar de su juventud, esta temporada ha tenido que gestionar el problema de sufrir un racismo extremo, pero otro añadido, lo que entiende que es una indefensión en los terrenos de juego. Al menos, cuando juega en LaLiga, puesto que sus partidos en la Champions son mucho más tranquilos porque, a su juicio, los árbitros sancionan mucho antes el juego brusco que sufre y eso sirve para cortalo.
Nike da el paso por Vini
Para Vinicius también ha sido muy bonito el detalle que ha tenido la marca que le viste, Nike, posicionándose firmemente con él en la lucha contra el racismo que ha iniciado. La marca americana ha ideado una campaña que ya está en marcha y que no sólo estará presente en formato digital. Ahí, en las redes, Nike ha posteado un mensaje con una imagen suya con la camiseta de Brasil y un mensaje sencillo, pero directo: “Stop looking the other way” (Paren de mirar hacia otro lado”). Esta idea se llevará a las calles de dos ciudades elegidas por la marca, Madrid y Valencia. La idea surgió hace pocas horas después de ver lo que pasó con una imagen publicitaria de la marca que viste al Madrid, situada cerca del Bernabéu, en la que un vándalo arrancó la cara de Vinicius.
Vinicius está encantado con la acción de Nike, que posteó ese mensaje con Vini como protagonista en su cuenta oficial principal, en la que tiene casi 300 millones de seguidores, y no en la secundaria Nike Fútbol (que no llega a los 50). El nivel de interacción de la gente marcó récords. La marca intenta un reacercamiento con la estrella después de que ésta intentara desligarse del contrato que tiene firmado hasta 2028. Incluso hubo un juicio que se celebró en Holanda, donde todas las marcas deportivas inscriben sus contratos porque la legislación de aquel país les es muy favorable.
Como sucedía en el Madrid, es un contrato firmado por Vinicius hace muchos años, cuando Vinel jugador sólo era un proyecto de futbolista y no la estrella mundial que es ahora. Cobra mucho menos de lo que le corresponde por relevancia y, además, sentía que la marca no le ponderaba tanto como a otras estrellas (Haaland o Mbappé) a las que también viste. Aquel juicio se celebró con el Vinicius entrenado por Zidane. Hoy, con el Vini de Ancelotti, la marca americana intenta volver a ganarse su cariño. Un cariño, en realidad, que el jugador empieza a recibir con fuerza por parte de la sociedad.