La lluvia y el Salón del Automóvil, los ‘obstáculos’ de Montjuïc
La amenaza de un temporal este domingo en Barcelona y el cierre de accesos a la montaña por el Salón del Automóvil podrían acarrear serios problemas al aficionado.
La previsión de fuertes tormentas en el Clásico de hoy en Montjuïc y el cierre de buena parte de los accesos a la montaña por la celebración del Salón del Automóvil, que levantó el telón este sábado y que se prolongará hasta el 18 de mayo, son las dos grandes preocupaciones que afronta el club de cara a la accesibilidad de los aficionados al estadio, en un día que se puede llegar a batir el récord de asistencia esta temporada, que actualmente está fijado en la cifra de 50.314 seguidores, que se congregaron el pasado 30 de abril en la ida de semifinales de Champions ante el Inter de Milán.
Todas las alertas están encendidas para minimizar en la medida de lo posible los problemas en el acceso al estadio que se pueda encontrar el socio. Para empezar, el riesgo de una lluvia intensa podría afectar al correcto funcionamiento de las escaleras mecánicas. De hecho, una dotación de operarios se movilizará en las horas previas para intentar solucionar posibles desajustes.
También se ha cambiado la ubicación de las lanzaderas que recogen al aficionado y lo suben a Montjuïc, debido al Salón del Automóvil, que bloquea la Avenida Maria Cristina. Así pues, los autobuses especiales saldrán desde el aparcamiento de Fira 2, situado al lado de los pabellones de Fira Barcelona de Gran Vía, así como también desde la Avenida Francesc Ferrer i Guàrdia, delante del ‘CaixaForum’.
Desde el Ayuntamiento de Barcelona se ha enviado, a través de su web oficial, una serie de recomendaciones al aficionado para evitar que la situación acabe en un auténtico caos. Para empezar que, en la medida de lo posible, la gente acceda a pie, evitando coger el vehículo privado, y recomendando también el uso de la moto, aunque si finalmente llueve tampoco sería el mejor medio a utilizar. También se hace especial hincapié en el funicular, donde se intensificará la frecuencia dos horas antes del partido, y en los buses regulares que cuenta el Ayuntamiento, aparte de las lanzaderas especiales. Éstas últimas tendrán un intervalo de salida de entre tres a cuatro minutos, con el fin de movilizar el mayor número posible de gente.
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Y como viene siendo habitual desde el club se insta al seguidor que acuda con varias horas de antelación para evitar la acumulación de gente y facilitar el acceso a la montaña. Además, la hora del partido (16.15 horas) propicia que muchas familias suban a Montjuïc, con el riesgo añadido de ir con niños y niñas de corta edad, que necesitan disponer de más facilidades y comodidades a la hora de acceder al estadio.
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