La cláusula de Claudio Bravo queda en manos de Pellegrini
El portero chileno, a punto de los 40 años, deja dudas en el Betis pero llegar a 25 partidos activaría su renovación un año más. El técnico sigue confiando en su veteranía.
Ciertos problemas físicos de Rui Silva y, también, que el guardameta portugués recibiese cuatro goles contra el Celta y dos ante el Almería provocaron que Claudio Bravo recuperase la titularidad en la portería del Betis en los dos últimos encuentros. Aunque Valladolid y Elche no han planteado demasiados problemas arriba, el chileno recibió otros tres goles: 12 lleva encajados en los 12 encuentros que suma esta temporada entre Liga, Europa League, Copa y Supercopa. Una cifra discreta, pero con la sensación de que habría haber hecho algo más.
Aunque sigue manteniendo un nivel más que aceptable y hace paradas interesantes, Bravo ha dejado de convencer a una buena parte de la afición verdiblanca, que cree que podría haber hecho más. El que decide, con todo, es su compatriota Manuel Pellegrini. Rui Silva, muy posiblemente, volverá a encontrarse en condiciones para la visita del Real Madrid la próxima jornada y el técnico deberá elegir. Éste año, al contrario de lo que ocurrió la pasada campaña cuando repartió mucho los encuentros entre sus dos primeros porteros, el portugués ha jugado bastante más que el chileno.
El caso es que a Claudio, que cumple 40 años en abril, le gustaría seguir en el Betis. Y ahora mismo eso anda más en manos de Pellegrini que nunca. Porque el meta andino tiene cláusula de renovación por una temporada más que se activa en el caso de que llegue a los 25 encuentros oficiales. La cifra, con 15 jornadas ligueras por delante y otras dos, como mínimo, en Europa League, parece posible pero resulta lejana si el entrenador vuelve a decantarse por Rui Silva la mayoría de las veces.
Pellegrini, en todo caso, ha dejado siempre claro la confianza que tiene en su compatriota desde que llegaran prácticamente juntos a Heliópolis, en el verano de 2020. Cree que además de un portero solvente se ha convertido en una pieza importante para el vestuario, así que con mucha probabilidad abogará por la continuidad al menos un año más si el meta así lo desea. A falta de que se active esa cláusula automática, aún quedan capítulos por escribir de Bravo en el Betis.