Kenedy vuelve a la casilla de salida
El atacante disputó ante el Real Madrid su segundo partido con el Real Valladolid, con el que debe ser importante en este 2023.
Solo cinco partidos. Ese fue el escasísimo bagaje competitivo de Robert Kenedy en 2022. El atacante del Real Valladolid disputó ante el Real Madrid su segundo envite de la temporada, que no sirvió más que para completar los cinco dedos de una mano en lo que a actividad oficial se refiere a lo largo de los últimos doce meses, puesto que anteriormente, con el Chelsea, apenas había disputado otros tres envites: uno de Premier, el último de la campaña anterior, y dos de la FA Cup.
Cerca de cuatro meses después de su primera actuación con el conjunto blanquivioleta, ante el Girona, dos meses y medio después de pasar por quirófano con motivo de una hernia en la ingle izquierda que sufrió durante la preparación del duelo ante el Getafe, el brasilero hizo su ‘redebut’ y se confirmó otra vez en la casilla de salida, esa de la que partió en septiembre con la vitola de fichaje estrella de cuantos acometió el club en verano, previo viaje de Fran Sánchez a Londres.
A los 20 minutos escasos en los que ha vestido la camiseta del Pucela desde entonces hay que sumar otros 45 cuando los pupilos de Pacheta viajaron a Burgos para jugar un amistoso ante Osasuna. Contra los rojillos, dio la sensación de estar fuera de forma, pasado de peso, después de lo que su técnico achacó el estrés del fichaje, acometido de manera casi sorpresiva a última hora del periodo de transferencias. En cambio, contra el Madrid dio otra imagen.
Aunque todavía deba elevar su ritmo de juego, y en sus solo seis minutos no le dio tiempo a hacer demasiadas cosas, Kenedy es igualmente una de las grandes esperanzas para la segunda mitad de la temporada, en la que ha de continuar mejorando su estado físico hasta convertirse en el futbolista determinante que se espera que sea, aquel que dejó retazos de una gran calidad en anteriores etapas en el fútbol español, cuando militaba en Getafe y Granada.