Javier Aguirre frente a su ‘cachorro’ César Montes: con Tri de triunfo
Juntos hace un año en Monterrey, el ‘Vasco’ regresa a Cornellà con el Mallorca y reaparece el central tras lesión en un Espanyol con Joselu como incógnita. Salvación contra… ¿Europa?
“Preguntaré a los jugadores si quieren ir a Europa”, se tomó la licencia de expresar Javier Aguirre, muy pronto hará una década, cuando a falta de seis jornadas para el final de Liga solventó su misión de salvar al Espanyol del descenso. Levantó ampollas y, aunque continuó un año más, ya nunca fue lo mismo. Ahora el Vasco regresa a Cornellà-El Prat en una tesitura similar con el Mallorca, con los deberes casi hechos y a solo tres puntos del sexto clasificado. Los que vuelven a estar en el barro, a dos del descenso, son sus queridos pericos, que cuentan con la reaparición de un “cuate grandote”, como a él le gustaba decir, al que bien conoce (sigue el partido de hoy en directo en As.com).
Se trata de César Montes, cachorro de Aguirre en Rayados de Monterrey hasta hace justo un año, quien en apenas dos meses como jugador del Espanyol ya podría escribir una novela. Llegó desde México, se adaptó rápidamente, encajó en el eje de la defensa, sufrió un golpe ante Osasuna que le dejó grogui y, cuando se había recuperado, una elongación le dejó fuera de juego las dos pasadas jornadas, frente a Real Sociedad y Elche. El concurso del capitán del Tri junto a Cabrera, que también regresa, pero tras sanción, se antoja primordial. Como Pacheco, asentado ya en la meta. También lo sería la presencia de Joselu en la punta del ataque después de tres semanas lesionado, pero en este caso dependerá más de sus sensaciones de última hora en los isquiotibiales. Quien nunca se lo pierde es Darder, que recibe a sus paisanos.
Muchos menos problemas de bajas que Diego Martínez, únicamente la de Copete, sufre un Mallorca cuyo único disgusto en esta Liga estriba a domicilio. Cuatro derrotas encadenan los bermellones en sus salidas, en las que no han sido capaces de anotar un solo gol. Un Jekyll y Hyde en toda regla respecto a Son Moix, donde sin ir más lejos vienen de meterle cuatro al Villarreal, con el primer doblete en la elite de Dani Rodríguez, el reencuentro de Muriqi con el gol y la confirmación de la gran sorpresa Kadewere. De hacer de su estadio un fortín desea aprender un Espanyol que solo ha ganado dos de sus 11 partidos en Cornellà, y que cuenta con las buenas rachas ante el Mallorca de Braithwaite (dos goles en tres enfrentamientos) y Puado (tres goles en los dos últimos años).
Maffeo, Raíllo o Morlanes por un lado, Brian Oliván por el otro, se añaden a esos reencuentros que abanderan Aguirre y Montes, entre dos equipos poco amantes de acaparar el balón, entre los que hace dos temporadas en Segunda saltaron chispas y que pretenden seguir viviendo este enfrentamiento durante muchos más cursos en Primera. 2.800 partidos acaba de cumplir el Espanyol en la máxima categoría: como para no aferrarse a la permanencia.