Iñigo, el único fichaje que pincha
Lastrado por la operación a la que sometió en la fascia derecha en junio, sólo ha jugado un cuarto de hora y este martes podría tener su oportunidad en Mallorca ante Muriqi.
Con Gündogan, Cancelo, João Félix e incluso Oriol Romeu, que llegó con menos expectativas, asentados en el once inicial, el único fichaje de los cinco que ha hecho el Barça 2023-24, que pincha de momento, es Iñigo Martínez. Central reputadísimo, 20 veces internacional, con casi todas las características requeridas para el puesto (agresivo, valiente en los duelos, con gran juego aéreo en las dos áreas y una buena salida de balón por su perfil zurdo), al central ondurratarra le ha lastrado, en sus primeros días de azulgrana, la inoportuna lesión que arrastró toda la temporada pasada en la fascia derecha; y que le obligó a tomar una decisión en junio. Ya con el visto bueno de los doctores del Barça, decidió operarse. “Una pequeña intervención”, matizó el día de su presentación para quitarle cierta trascendencia a la lesión. Sin embargo, la tenía.
Iñigo no pudo hacer una pretemporada normal como el resto del grupo, ni jugar ninguno de los tres amistosos en la gira por Estados Unidos. Tampoco participó en el Gamper y, de momento, sólo ha tenido un cuarto de hora testimonial. Salió para proteger el 1-2 en Pamplona un par de minutos; y con el 5-0 del Betis. Por detrás de Araújo, Koundé o Christensen (hasta De Jong jugó de central en el partido ante el Cádiz), tal vez haya llegado su momento. Xavi dejó caer que habrá rotaciones en Palma y que las mismas podrían incluir a Koundé, que de momento lo ha jugado todo. Asoma como un partido ideal para Iñigo, que podría emparejarse a Muriqi y, junto a Araújo, detener al kosovar, con un juego aéreo excelso.
Iñigo tenía al Barça entre ceja y ceja. Ya pudo ser azulgrana al inicio de la temporada 2019-20, pero a Valverde le frenaron el fichaje por la presión que Mascherano ejerció en Messi y otros pesos pesados. El curso pasado, cuando ya había dudas con Pique, Mateu Alemany llamó al director general del Athletic, Jon Berasategi, para negociar el fichaje del internacional. Sin embargo, recibió calabazas desde Bilbao. Xavi se puso en contacto con Iñigo y le dijo que no se preocupase. Sabedor de que terminaba contrato en junio de 2023, le pidió que esperase y le garantizó que sería la primera opción si Piqué decidía retirarse. El legendario ‘3′ del Barça anticipó su despedida a noviembre del pasado año, pero Xavi no faltó a su palabra. Iñigo firmó por el Barça, donde hace años es un jugador valorado por su perfil como central y por su liderazgo. Laporta también alabó esas características en su presentación como pegamento en el vestuario y con el carácter suficiente para meterle más ADN competitivo al equipo.