Incógnita Hazard
Ancelotti tuvo en su mano confirmar al belga ante el Sevilla, pero lo dejó en el aire hasta tres veces. “Lo que necesita Hazard, lo hablo con él y no aquí”, zanjó el técnico.
Hasta tres oportunidades tuvo Carlo Ancelotti en sala de prensa para confirmar la participación de Hazard contra el Sevilla. Primer asalto: ¿Es mañana buen partido para ver a Hazard? “Sacaré a un equipo para intentar ganar. Será una alineación muy competitiva. Tenemos jugadores muy buenos. Segundo: ¿Qué le pide a Hazard? “Lo que necesita lo he hablado con Hazard, no aquí”. Tercero y último: ¿Jugará Hazard mañana? ¿Sería más fácil para usted si no siguiera el año siguiente? “Me resulta sorprendente que no tengas paciencia a esperar a mañana. Nunca he dado la alineación el día antes del partido. Hazard tiene contrato y ello implica que se queda. Si no está contento tiene que pedir al club una salida y si está contento se queda, como todos”. “Calma, que mañana la alineación llega”, se despidió, con media sonrisa y sorna, de la Prensa presente en Valdebebas. Un once donde Hazard puede estar. O no.
Por fondo de armario, es un ahora o nunca. Sin Vinicius, Benzema, Asensio ni Mariano, sólo el de Louviére y Rodrygo lucen como atacantes puros. Valverde es tan extremo como centrocampista y Álvaro Rodríguez, aunque se cuenta con él para la próxima temporada con los mayores, es el delantero centro de Raúl en el Castilla. La penúltima oportunidad para que Eden luche por, al menos, dejar de ser (casi) invisible la próxima temporada. Porque su intención es esa, cumplir el año que le queda en el Real Madrid. Aunque la del equipo blanco sea otra...
“Si no está contento tiene que pedir al club una salida y si está contento se queda, como todos”
La temporada de Hazard se resume en 392 minutos. Sólo Mariano, Odriozola y Vallejo han contado menos. Los últimos 61′ se vislumbraron como oportunidad de oro. Titular en Getafe, por la banda izquierda que le elevó al Olimpo futbolístico, que le convirtió en ídolo en Stamford Bridge e hizo al Madrid convertirle en el primer galáctico posCristiano; la banda que Vinicius le arrebató definitivamente cuando la temporada pasada amanecía. ¿Resultado? Ningún regate intentado, ninguna ocasión creada, ningún pase clave, sin disparos a portería... Hazard pasó de puntillas ante los de Bordalás. La bala se fue al limbo y al cartucho de oportunidades le queda poca munición.
Sudoku
La situación de Hazard es un sudoku de difícil solución. Como decíamos, Eden quiere seguir de blanco hasta cumplir su contrato que expira el 30 de junio de 2024. El Real Madrid estaría encantado de encontrarle destino. Lo primero, para ahorrarse (al menos parte de) la ficha, la más alta de la plantilla, 30 millones de euros brutos por temporada. Lo segundo, para que su lugar lo ocupe un futbolista que cuente para Ancelotti.
Carletto trató de reconvertirle en falso nueve a comienzo de temporada y hubo algún brote verde como aquel partido en Glasgow en el que, tras sustituir a un lesionado Benzema, marcó y asistió. No ha vuelto a ver puerta y sólo ha repartido una asistencia más. Escaso bagaje para voltear su sino en el Madrid. Su “quiero demostrar que mi carrera todavía no se ha terminado” de Cibeles se lo ha llevado el viento. La operación Kane, donde según la SER podría estar inmiscuido el belga, aparece como halo de esperanza. De momento, todo es una incógnita con Hazard. Hasta su titularidad en Sevilla.