Hazard se vuelve transparente
Explotó en Glasgow, decepcionó ante el Mallorca... y ha desaparecido. Desde aquel 11 de septiembre no ha vuelto a jugar ni un minuto. Ancelotti ya está eligiendo antes a Mariano
Y cuando más parecía que sí, volvió a ser que no. Hazard no sale del atolladero. Tuvo una noche sobresaliente en Glasgow con la que asaltó portadas internacionales y pareció gritarle al mundo que cuando uno de La Louvière hace una promesa -incluso ante la diosa Cibeles-, la cumple. Su partido fue brillante: justo cuando Benzema se lesionaba y más fuerte afloraba el runrún, dio un paso al frente. Le regaló a Modric el segundo gol y firmó el tercero para sofocar el incendio que, por momentos, pareció avecinarse en Celtic Park. Él mismo entrevió su gran oportunidad; la bala de tener un mes entero para rodar, coger ritmo, llenar el depósito de confianza -propio y ajeno- y afianzarse como recambio en la delantera. Pero todo acabó en nada.
Porque repitió ante el Mallorca y su actuación fue insípida. Al no ser un delantero centro al uso, se le vieron las costuras ante un esquema tan replegado como el que planteó el ‘Vasco’ Aguirre. Anduvo impotente, perdido. Y tampoco consiguió cumplir la otra orden que Ancelotti le dio: “Entrar desde la segunda línea”, como desveló en rueda de prensa. Pese a su decepcionante papel, Carletto decidió echarle un capote: “Ante el Mallorca yo no le pedí que marcase; hizo lo que debía. Yo creo que ha cumplido, sí”. Pero los números reflejan que, evidentemente, perdió un tren.
Ostracismo
Porque ha desaparecido. Nada. Cero. Desde aquel soleado domingo, 11 de septiembre, Hazard no ha vuelto a tener un solo minuto. Frente al Leipzig el escogido fue Rodrygo y cuando tuvo que entrar alguien de recambio, salió Mariano. En el derbi, otra vez el brasileño (Ceballos le sustituyó para aportar contención en la recta final). Y después, volvió Benzema. El francés fue titular ante Osasuna y Shakhtar. Lo más reseñable, en estos dos partidos, es que ante los rojillos, cuando tocaba ir al ataque con todo, Ancelotti volvió a preferir a Mariano antes que a él. “Es que necesitaba un delantero centro fuerte para ir de cabeza. No era un partido para la calidad de Hazard”, fue el argumento del técnico en rueda de prensa.
El tiempo corre contra Eden y su promesa en Cibeles: “Madridistas, llevo tres años aquí con muchas lesiones, muchas cosas... ¡Pero el año que viene lo voy a dar todo por vosotros!”. Lo dijo... y enloquecieron las miles de personas que presenciaron su alegato. Pero entra octubre, se asoma el parón del Mundial... y nada de nada. Ahora mismo es el quinto jugador de la plantilla que menos minutos ha jugado (158′); sólo Asensio (73′), Mariano (9′), Odriozola (0′) y Vallejo (0′) llevan menos. Recientemente le han adelantado Lunin (180′) y Ceballos (177′). Tal y como contó AS, le vaya lo mal que le vaya, no contempla la opción de salir cedido en el mercado de invierno. Acaba contrato en junio de 2024 y quiere seguir, pese a que se haya vuelto -otra vez- transparente.