Guillamón vuelve consagrado a su cuna
El canterano che, nacido en San Sebastián, se estrenó con el primer equipo del Valencia en la casa de la Real. Desde aquel día, no ha parado de crecer.
Hugo Guillamón nació en San Sebastián. Eso pone en su DNI. Con solo dos años, emigró a Valencia. Sus recuerdos de infancia en Donosti no existen porque Hugo se siente valenciano y valencianista por los cuatro costados tras entrar en la Academia con apenas cinco años. Ha mamado el blanco y el negro desde niño. Sin embargo, San Sebastián siempre será especial para él porque allí nació y porque en su cuna debutó con el primer equipo del Valencia.
En febrero de 2020, Guillamón cumplió su gran sueño. Albert Celades le dio al alternativa en Anoeta (ahora Reale Arena). Hugo saltó al campo tras el descanso. Unas molestias de Mangala le abrieron las puertas del primer equipo. El destino quiso que el central debutase en la ciudad en la que nació. Al margen de caer 3-0 y de alejarse un poco más de Europa el día de su estreno, no corrían buenos tiempos para el Valencia. De hecho, Guillamón fue uno de esos brotes verdes de un curso que tuvo que paralizarse por la pandemia y que terminó con Voro en el banquillo ché tras la destitución de Celades.
Dos años y nueve meses después, Hugo regresa este domingo al escenario en el que se enfundó por primera vez la camiseta que siempre llevó puesta. Ahora lo hace consagrado, como piedra angular del Valencia del presente y del futuro. Hace poco renovó hasta 2026 y reconoció que era uno de los días más felices de su vida. Guillamón también vuelve como mediocentro y con muchas opciones de estar en el próximo Mundial con España. Del chico que debutó con 19 años con el Valencia quedan pocas cosas porque Guillamón ha multiplicado por diez su madurez en el campo.
El mediocentro del Valencia está siendo clave para Gattuso, como también lo fue el curso pasado para José Bordalás. Además, su valor de mercado se ha disparado en las últimas temporadas. Para Olocip, empresa especializada en Inteligencia Artificial, el canterano ché tiene un valor de 24.897.900 euros. Justo cuando debutó, su precio era de apenas 740.000 euros.