‘Fortín’ Camp Nou: ¡287 días sin encajar un gol de jugada!
El Espanyol fue el único rival en LaLiga que ha sido capaz de marcar, gracias al penalti que logró Joselu. En jugada nadie ha podido todavía anotar este curso.
El Camp Nou se ha convertido en una muralla infranqueable en LaLiga. Y no se trata de ninguna metáfora ni un juego de palabras, sino de una realidad incontestable, como demuestra el dato que sólo ha encajado un gol en los doce partidos que se han disputado en el coliseo blaugrana, con el añadido que fue de penalti. El autor de esta proeza fue Joselu en el derbi que se disputó el 31 de diciembre, tras fabricarse él solito un penalti un tanto ingenuo de Marcos Alonso. Así pues, el delantero del Espanyol tiene el honor de ser el único rival que ha sido capaz de marcar esta temporada en el Camp Nou.
De hecho, para ver el último gol que encajó el Barcelona en casa en jugada hay que remontarse al pasado 22 de mayo del 2022 cuando Moises Gómez fue capaz de aprovechar un error en el despeje de Adama Traoré para poner el 0-2 en el marcador. Era el minuto 55. Desde ese momento, la portería de Ter Stegen se ha cerrado a cal y canto en LaLiga, a excepción del penalti que marcó Joselu en el último partido del año.
Los números son tan contundentes como rotundos en este sentido: en el Camp Nou hace 287 días que nadie es capaz de romper la red en una acción de jugada. Más de cuarenta semanas con la portería prácticamente a cero, pasando rivales como Villarreal (3-0), Athletic (4-0), Sevilla (3-0) o ahora Valencia (1-0), entre otros, y dejando bien patente cuál es el poderío del equipo de Xavi, que ha sido capaz de dejar a Ter Stegen inédito en once de doce partidos. Unas cifras que permiten al portero alemán mirar con relativa tranquilidad a sus competidores por el trofeo ‘Zamora’, ya que, con sólo ocho tantos encajados en 24 jornadas, va camino de batir incluso el récord de Paco Liaño, que con el Deportivo fue capaz de encajar sólo 18 goles en una temporada, a mediados de la década de los noventa.
Es evidente que Ter Stegen tiene buena parte de ‘culpa’ de estos extraordinarios números defensivos que arroja el Barcelona en casa, aunque la aportación de los defensas es también incuestionable. Y que con las llegadas de Andreas Christensen y Jules Koundé, el ascenso de Alejandro Balde y la confirmación de Ronald Araújo, como el mejor central del mundo, estamos seguramente ante la más poderosa retaguardia del planeta.