El factor Pedri

Pedri terminó de encender la luz del Barça en el Al Awwal Stadium. Apareció con el partido cuesta abajo después del gol de Lewandowski; y contó con dos socios excepcionales, De Jong y Gündogan, que jugaron un partido brillante. Pero Pedri, como dice Albert Luque, director de la Selección, es “otra cosa”. “Cuando él sale, todo se aclara”, dijo un Xavi feliz por una reaparición que ha llegado antes de lo que se esperaba. Una nube se volvió a cubrir sobre el canario en diciembre, justo después del partido de Valencia. En el corrillo que Joan Laporta hizo con los periodistas después del cocktail de Navidad, el presidente soltó la bomba: “Pedri se ha vuelto a lesionar”. Un golpe en el bíceps femoral de su pierna derecha había desembocado en lesión. El canario se perdió el partido contra el Almería y no viajó a Dallas para cerrar 2023 en el amistoso contra el América. Fue entonces cuando se puso fecha de regreso: la Supercopa. Para muchos, era una previsión muy optimista.

Pero Pedri lo consiguió porque lo está poniendo todo. Ha cambiado sus hábitos de comida (aquella famosa frase de “no me dejan comer las croquetas de mi madre” que dijo en la pasada pretemporada en Los Ángeles, es una realidad por el cuidado que pone en la alimentación), hace trabajo muy específico de prevención de lesiones; y hasta se ha apuntado a hacer pilates por recomendación de Carles Puyol según le confesó en una entrevista reciente al youtuber Ibai Llanos. Todo, para volver a ser ese futbolista diésel y regular que demostró ser capaz de jugar más de 70 partidos en una temporada…

Para Xavi, colocar a Pedri este domingo en la final contra el Madrid es una tentación. Ayudaría a equlibrar la pelea del centro del campo contra los Valverde, Tchouameni, Bellingham y Kroos. Pero también tendría sus riesgos. Pedri jugó a buen ritmo contra Osasuna. No sólo se movió de fábula con la pelota. También se le vio apretar en la presión y hasta hacer algún sprint largo que demostró su confianza. Pero con toda la temporada que queda por delante y los precedentes, el técnico podría ser prudente y volver a darle un rol de media hora para congelar el partido si el Barça está en ventaja; o activarlo y encontrar agujeros en la defensa rival si todavía no se ha puesto de cara. Pero siempre con el cronómetro en la mano porque el canario ya ha tenido un par de lesiones esta temporada y llegan citas importantes. Forzarlo ya se ha demostrado anteriormente un error.

Pedri es jugador franquicia del Barça y, pese a los problemas físicos que ha arrastrado en los últimos tiempos, esa idea no ha cambiado. Sobre un centro del campo con él y Gavi quieren construir su equipo de futuro Deco y Xavi. Es intocable. Director deportivo y técnico esperan magia del canario mañana.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.