El estadio Martínez Valero abre las puertas al Centenario
El Elche estrena las reformas internas con nuevos marcadores, banquillos, césped, butacas y otra serie de cambios que han gustado a los aficionados.
El Martínez Valero abrió sus puertas al Centenario. El Elche regresó a casa por primera vez desde que acabase la pasada temporada. Y lo ha hecho con mejoras interiores para el disfrute de sus casi 24.000 abonados y mayor comodidad de los profesionales.
Las novedades más llamativas en el estadio del Elche se han presentado en los dos videomarcadores, en la zona alta del Anillo Superior de ambos fondos. Los dos ocupan la superficie de los antiguos, pero con plena pantalla y sin publicidad en el marco.
Los dos banquillos también han llamado la atención, integrados en las primeras filas de la grada de Tribuna y dejando su posición anterior para una amplia área técnica que han estrenado, en esta ocasión, Francisco y Rubi. El modelo trata de emular a los del fútbol inglés aunque, en este caso, presentan techo para proteger a técnicos, suplentes y auxiliares de las inclemencias del tiempo. La parte inferior de la Tribuna no tiene cubierta.
El césped también ha sido resembrado, sustituyendo el sustrato y la semilla, y, a diferencia de otros veranos, ha presentado una imagen perfecta. Además, los aficionados de la grada superior han estrenado butacas y la zona de vestuarios, además de haberse ampliado, también ha contado con una nueva zona mixta con la decoración con motivos del Centenario.
Donde no se han visto novedades ha sido en el exterior del Martínez Valero. Esa fase se pondrá en marcha a partir de la próxima temporada, siempre que el equipo siga en Primera División.