“El Espanyol no va a ninguna parte, es el momento de una venta”
“El problema no es Mao, el problema es Chen, no hay manera de trabajar en equipo con él”, sentencia el exdirector general corporativo, Roger Guasch, quien también carga contra Rufete.
Con bala disparó Roger Guasch a la convulsa situación del Espanyol. El que fuera director general corporativo del club entre enero de 2018 y diciembre de 2019 opinó con claridad sobre el rumbo que se debería tomar, en una entrevista este lunes para el canal de Twitch del periodista Javier de Haro. “Esto no va a ninguna parte, es el momento de una venta, de cambio, se necesita un proyecto nuevo, en el que el directivo pueda hablar con el presidente para hacer un club grande”, sentenció.
“Me gustaría agradecer a Chen lo que ha hecho por el club pero es el momento de una transición en que los directivos del club puedan hablar con el presidente y hacer proyectos con él. Si no, no saldremos de esto, todo es unidireccional y las cosas al final degeneran. Es muy difícil a 12.000 kilómetros”, justificó Guasch, quien matizó acto seguido que “el problema no es Mao (Ye Wu, actual CEO de la entidad), una de las personas más eficientes que me he encontrado. El problema es Chen (Yansheng, propietario del club desde 2016), no hay manera de trabajar en equipo con él por razones obvias”.
Rousaud como enlace clave con Chen
Y esas razones obvias pasan por la barrera idiomática y por la cultura. Como demostración, explicó Guasch que “había una persona del club a la que Chen daba autoridad y tenía respeto, y mientras fue vicepresidente las cosas fueron muy bien. Era Adolf Rousaud. Le transmitía muy bien a Chen lo que Óscar Perarnau (que era director general deportivo) o yo queríamos hacer. Cuando desaparece esa figura, Chen vuelve a la desconfianza no sé si a los occidentales (tal como había afirmado recientemente el también exdirector general, José María Durán) o a la gente que tiene a su alrededor”.
“Si fuera por Chen, a lo mejor no habría ni fútbol femenino”
Otro ejemplo de la mentalidad del propietario y presidente del Espanyol, en palabras del exejecutivo, es que “si fuera por Chen, por cultura, a lo mejor no habría ni fútbol femenino. Entre Perarnau y yo le convencimos, pero con las secciones directamente no había manera”.
“Perdimos a Rubi por Rufete, un gran error que aún arrastramos”
Pero, a juicio de Guasch, la principal equivocación de Chen fue otra. “A pelota pasada, puedo decir que el fichaje de Rufete fue un error. Perarnau le delegó no solo el trabajo, sino la responsabilidad, porque si decía blanco era blanco, si quería fichar a David Gallego, fichaba a Gallego. Creo que se perdieron los grandes aciertos de Perarnau, decisiones muy meditadas, como Borja Iglesias y Rubi”, desgranó.
Narró el exdirector general corporativo lo sucedido al final de la temporada 2018-19, cuando el Espanyol se acababa de clasificar para Europa con Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’ como entrenador: “Chen se reúne con Rufete, habla con Gallego y no habla con Rubi. Ahí perdimos a Rubi por una decisión de Rufete que no tocaba. Creo que fue un gran error que aún arrastramos”, aseguró.
“Me enfrenté a Chen porque íbamos a la deriva”
“En junio de 2019 me enfrenté a Chen por este tema, porque íbamos a la deriva”, destapó Guasch. “Hay momentos en que todos nos podemos equivocar, pero Chen confiaba en él y la demostración es que apartó a Óscar (Perarnau) y siguió confiando en Rufete una temporada más”, añadió. Y lamentó cómo “Rufete decidía desde qué letras había que poner en las paredes de la Ciudad Deportiva a qué jugador podía ir a la Ciutat dels Somnis. Yo me rebelo, se lo digo a Chen, Rufete tiene un vicepresidente que lo mantiene (Carlos García Pont), y la cosa acaba como acaba”.
“Estuvimos a punto de cerrar con Adidas”
Se congratuló Guasch de haber “presentado las mejores cuentas en la historia del Espanyol porque trabajábamos con un proyecto y pensando en grande”. Y también de un acuerdo que estuvo muy cercano para la equipación deportiva. “Estuvimos a punto de cerrar con Adidas por la marca Barcelona. Pero Kelme daba más dinero y se tomó la decisión por parte de Chen, que era al final quien decidía, de no hacer el cambio”, aseveró.
Y, cómo no, se trató el asunto del desdoblamiento de los carnets de socio del Espanyol, que él impulsó en 2018 desde la dirección general y que aún hoy sigue siendo polémico. “¿Que si me arrepiento? No. Yo puedo aceptar un error de comunicación y de ir demasiado rápido. Creo que no lo explicamos bien. Pero yo me fui del club en 2019 y nadie ha tocado los abonos, ni los dos carnets de socio y abonado. Por algo será”, dejó caer un Guasch que lanzó este deseo: “Me gustaría ver un gran club y ojalá exista un proyecto que lo pueda conseguir”.