El castigo del gol inesperado

Queda claro que si el Espanyol flirtea con el descenso, que le queda ahora mismo a un solo punto, no es por culpa de su capacidad goleadora. Se trata del segundo equipo de la Liga con mayor acierto (un 16,1 por ciento), cuenta con una dupla letal (12 goles de Joselu Mato y ocho de Martin Braithwaite) y es, de los conjuntos con menos de 30 puntos, el que más anota: 31 dianas. Y a pesar de ello, le condena la defensa. Los goles recibidos. Y muchos son evitables.

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De los 39 tantos en contra en las 25 jornadas que se llevan disputadas del campeonato, se podría haber ahorrado al menos seis el Espanyol. Según la estadística de Opta, es el conjunto de Primera que más distancia alberga entre los goles recibidos y los esperados (el famoso XG), que se situarían en 32,7, es decir, 6′3 dianas por debajo. Una forma sintomática de demostrar que han cometido los pericos numerosos errores groseros. No en vano, en solo cuatro partidos han terminado con la portería a cero. Más que goleadas de escándalo, es un goteo incesante de goles en contra lo que les sitúa al borde del descenso.

Curiosamente, el segundo equipo que más dianas podría haber evitado, 5′6 exactamente, es el Celta, rival del Espanyol este sábado en el RCDE Stadium, que en realidad ha recibido 34. Y eso que llega en la mejor racha de la temporada, puesto que enlaza tres jornadas imbatido, las mismas en las que la escuadra de Diego Martínez ha encajado seis goles. El siguiente, con 5′5 goles más recibidos de los esperados, es un Girona que aguarda a los blanquiazules en Montilivi a la vuelta del parón.

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Ni siquiera los conjuntos más goleados de la Liga sufren este mal. El Elche, al que han endosado 49 goles, debería llevar incluso más, 52, mientras que el Almería y el Sevilla ajustan sus 44 y 40 tantos recibidos, respectivamente, a lo esperado. La parte buena para el Espanyol es que hasta la estadística le está mostrando que el margen de mejora es evidente, que fácilmente debería poner el cerrojo. La mala, que ya está tardando demasiado en solventar esos errores letales.