El Atleti pierde su esencia
El equipo de Simeone carece de la solidez defensiva que ha caracterizado la etapa del argentino, registrando el mayor porcentaje de goles encajados por partido.
“Tengo que buscar herramientas para recuperar seguridad defensiva”, este fue el análisis de Simeone tras encajar cinco tantos ante el Real Madrid. El Atlético de Madrid está mostrando una fragilidad impropia de un equipo del Cholo. Un equipo que está mostrando mucha contundencia en el área rival, con dos delanteros en una forma espectacular como son Morata y Griezmann, pero que no son suficientes para sobrevivir a la debacle de la zaga.
Una imagen que muestra a la perfección lo que está siendo el Atlético de Madrid en 2024 es la cantidad de goles encajados. Diez tantos en tres partidos. El Real Madrid anotó a Oblak cinco tantos, uno pudo hacer el Lugo en Copa y cuatro goles hizo el Girona en Montilivi. La media es asombrosa: 3,3 goles por partido. Ganar así es muy complicado para cualquier equipo, y la recuperación del Atleti pasa por volver a apuntalar la zaga. Una defensa construida a parches, con un Savic en horas bajas, Giménez que no logra su mejor versión por culpa de las lesiones y un Hermoso que está mostrando su mejor nivel desde que está en el conjunto rojiblanco.
Los datos no mienten y el Atlético está viviendo la peor temporada defensiva desde que Simeone es entrenador. La media de goles encajados es de 1,3 goles por partido, traduciéndose en 35 goles esta temporada, sumando todas las competiciones. Empeorando los datos de la temporada 2021-22 que registró 1,12 goles por partido. Esto supone que el Atlético de Madrid deba marcar dos goles como mínimo para poder ganar esta temporada. Pero si nos ceñimos a los datos de este arranque de año, los colchoneros deben marcar cuatro goles para poder ganar. Esto aleja mucho al equipo de la posibilidad de ganar títulos. Una lástima para Simeone, puesto que esta temporada sí tiene a ese delantero que marca 20 goles en una temporada. Además, lo tiene por partida doble con Morata y Griezmann.
La fragilidad se potencia en la zona Cesarini
Uno de los sellos de Simeone que se ha perdido esta temporada es la capacidad de cerrar partidos. El cerrojo está roto y la puerta queda descubierta en los minutos finales. Al Atlético de Madrid se le han escapado tres partidos en la denominada zona Cesarini. El Madrid con los goles de Savic en propia puerta en el 116′ y el de Brahim en el 122′ le arrebataron la posibilidad de acudir a los penaltis para decidir el pase a la final de la Supercopa. El gol de Iván Martín en el 91′ le arrebató el empate al Cholo en Girona, en un partido clave. El Getafe también hizo daño en los minutos finales con los tantos de Óscar Rodríguez en el 87′ y el de Mayoral en el 93′ para sacar un empate tras el 3-1 que lucía el marcador del Metropolitano.
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