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ATLÉTICO

El Atleti no sabe ganar sin Koke

El equipo del Cholo acusó la falta del capitán, por molestias, en el Camp Nou. Los rojiblancos solo han ganado un partido de los siete en los que esta 22-23 no estuvo.

Actualizado a
Savic y Koke, en una sesión del Atlético. Faltó en el Camp Nou, derrota del Atlético.
PEPE ANDRESDiarioAS

El Atlético perdió su segundo partido en Liga del año 2023 en el Camp Nou, ante el Barcelona, condicionado por dos ausencias. Una, la del gol. Faltó en una primera parte de fútbol-trituradora, faltó en una segunda de toma y daca con múltiples ocasiones. Pero no fue la única falta. Otra cumplió la premisa de ese principio no escrito pero que se repite una y otra vez en los partidos del Atlético del Cholo: si falta Koke, el equipo no gana. Koke, una figura fundamental y, a menudo, no reconocida como se debe, hasta pitada, incluso, en algunas ocasiones, aunque con los datos en la mano eso suene a, casi, herejía. Porque cuando Koke no está, los rojiblancos sufren. Y, peor, porque el Atleti puede perder partidos con él, claro, pero sin él ese suele ser el final. La derrota. El Camp Nou fue ejemplo. Y esta 2022-23 en general.

Koke, de hecho, fue la gran sorpresa cuando una hora antes del Barça-Atlético se conoció el once del Cholo. La gran sorpresa porque su nombre no estaba en el once. Simeone había probado con él a lo largo de toda la semana, pero en las alineaciones, su lugar lo ocupaba Witsel. No obedecía a una cuestión táctica ni a un plan ulterior. Faltaba porque, como explicó Simeone, después en sala de prensa, no podía estar. “Venía con molestias, no queremos perderlo, vienen partidos seguidos y el futbolista que tenga una lesión importante se queda sin jugar”, dijo. Molestias derivadas del último entrenamiento porque, lo escrito, durante toda la semana el centro del campo del argentino con la cabeza en el Camp Nou eran Koke, De Paul y Lemar.

Desde que el Metropolitano se estrenó, en 2017, ha habido dos ocasiones en las que el Atlético no ha superado la fase de grupos de la Champions. Y las dos con esa premisa común: Koke no estaba. Una fue en aquella temporada misma del estreno, la 2017-18, que los rojiblancos terminaron terceros y continuaron su camino en la Europa League, que ganaron, en los partidos de Liga de Campeones ante el Qarabag en los que el Atleti no pasó del empate, Koke estaba en la enfermería. Otra, esta misma, ante el Leverkusen en el Metropolitano, que supuso la pérdida matemática de opciones de Champions, y ante el Oporto, que supuso el adiós europeo del todo, no continuaría esta ni en la Europa League, Koke tampoco estaba. Cuando tantas veces ocurre no se le puede llamar casualidad.

Solo una victoria sin Koke en siete partidos en la 22-23

Esta temporada el Atleti ha jugado sin su capitán siete partidos y el dato es revelador, como destacaban en @atletico_stats_, cuenta de Twitter que analiza el transcurrir rojiblanco desde los datos: el equipo del Cholo solo ganó uno (ante el Betis en el Villamarín, 1-2). Ante Rayo, Leverkusen y Espanyol no pasó del empate (1-1, 2-2 y 1-1) ante el Cádiz, el Oporto y ante el Barcelona, perdió. “Si pensara más en mí, quizá me hubiera ido mejor, pero no sería Koke”, esgrimía hace poco más de un año el capitán en una entrevista con AS. Y esa es una frase que no puede definirle mejor.

Su desgaste por todos, el futbolista que siempre más corre, el que siempre está en su sitio, colocado por él y lo demás, para las coberturas, para las ayudas, para las recuperaciones (12 hizo ante el Rayo en Vallecas, por ejemplo, su récord de la temporada) con ese pie afilado capaz, siempre, de encontrar la solución. Como si al pasar por su bota dotara al cuero de materia gris: cuando pasan por él, corren distinto, como con toda intención. Pero ganar en el Camp Nou era un premio a una temporada que se fue por el sumidero demasiado pronto, apretar una Liga a demasiados puntos de distancia en realidad y, si Koke viajó con molestias, mejor no forzarlo. Simeone, realista, decidió guardarlo para lo que viene, para no fallar en los ocho partidos que restan. Tener a Koke no asegura la victoria, pero sí que perder sea más complicado. Porque Koke es uno de los grandes pilares sobre los que se asientan los años dorados de su Atleti. Estaba ya en la Europa League de Quique Sánchez Flores, de hecho. Solo hay que contar todo lo que viene después. Sí. Algo se repite. Koke siempre está ahí.