Del Cerro Grande, revisando las imágenes: “Es un rebote, es un rebote”

Del Cerro Grande protagonizó la primera polémica de la temporada, el primer penalti señalado en esta Liga en un Sevilla-Osasuna, un ‘penaltito’ de los que Medina Cantalejo instó a que no se castigaran, y también la última hasta la fecha, su decisión de no interpretar como penalti las manos de Fernando en Mestalla. El colegiado madrileño, poco dado a sancionar con pena máxima este tipo de jugadas, quien acudió hacia la pantalla en paso de procesión tras llamada de Estrada Fernández desde la sala VOR, estuvo cerca de tres minutos revisando las imágenes, al tiempo que los 40.000 presentes en Mestalla veían por el videomarcador como el balón impactaba en la mano del defensor sevillista y mientras Ilaix le entregaba el esférico a Cavani para que se preparase para el lanzamiento. Pero Del Cerro Grande dijo no.

Los presentes en los banquillos de Valencia y Sevilla escucharon como Del Cerro Grande decía: “Es un rebote, es un rebote”. Esa era su justificación verbal de por qué no señalaba penalti, mientras que la gesticular era indicar la posición a su entender “natural” del brazo de Fernando, algo que los valencianistas le ponían en entredicho. Del Cerro Grande tiene varios precedentes en los que no ha castigado penalti por acciones simulares y en uno de las que veces que sí lo señaló fue porque falló la tecnología y no pudo revisar las imágenes, teniéndose que fiar en la interpretación del colegiado del VAR. En concreto eso sucedió en Champions.

Precedentes de Del Cerro Grande de manos en el área:

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- Elche-Cádiz (4 de marzo de 2021). No pita penalti tras golpear el balón en el brazo de Pere Milla tras un centro cadista. Del Cerro Grande no revisó la acción en la pantalla.

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- Villarreal-Athletic (9 de abril de 2022). No pita penalti tras golear el balón en el brazo de Aurier. Sí fue a revisarlo en la pantalla y mantuvo su criterio.

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- Sevilla-Barcelona (23 de enero de 2019). No pita penalti tras golpear el balón en el brao de Arturo Vidal. Sí fue a revisarlo en la pantalla y mantuvo su criterio.

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- Schalke 04-Manchester City (20 de febrero de 2019). Pita penalti tras golpear el balón en la mano de Otamendi tras remate de un delantero alemán. Lo pita a instancias del VAR, dado que fue el que le avisó de la infracción. Del Cerro Grande no pudo revisar la imagen por un fallo tecnológico, por lo que decidió seguir las indicaciones de su colega de la sala VOR.

La decisión de Del Cerro Grande en Mestalla generó más unanimidad en contra de su criterio que división de opiniones. Inclusive avivó el debate sobre cuándo es manos por penalti y cuándo no, como expuso el jugador del Rayo Vallecano Óscar Valentín en Twitter.

Durante el seminario de formación de los árbitros de cara a la presente temporada en agosto se habló de este tipo de acciones. De hecho las conclusiones de dicho seminario es el último escrito del estamento arbitral que preside Medina Cantalejo al respecto.

Del Cerro Grande, dadas sus explicaciones a Gayà y Navas, se ampara en la interpretación que permite el reglamento a la hora de sancionar dicha acción. Según dicho documento fechado el 9 de agosto de 2022, no se castigará con penalti: “Manos pegadas/Próximas al cuerpo: Si la mano o el brazo están cerca del cuerpo y no se encuentran en una posición antinatural con la que se consiga ocupar más espacio”. No obstante, en el propio documento se hace una matización que se daba en la acción de Fernando, dado que de no darle en la mano, Castillejo hubiera podido avanzar hacia portería:

“En aquellas acciones en las que la posición del brazo o la mano puedan estar al límite de la sanción, se recomienda a los árbitros que valoren la consecuencia posterior sobre el juego que hubiera habido de no haber tenido lugar ese contacto, como un agravante o un atenuante de cara a la decisión final a tomar, pero solo para acciones “grises”, no para situaciones donde la posición de la mano o brazo sea claramente sancionable”.

En ese seminario también se dejó claro que la intervención del VAR “nunca puede recomendar una revisión en jugadas “grises” o discutibles”. Está claro que para Estrada Fernández no fue una acción gris y de ahí que instara a Del Cerro Grande a ver las imágenes, unas manos que en directo el colegiado madrileño no vio porque no hizo el habitual gesto de cruzar las manos en señal de que para él no había pasado nada.