De Jong, un foco de conflicto
Koeman acusó al Barça de forzar su tobillo. Sólo ha jugado uno de los últimos 20 partidos de la ‘Oranje’. Pese a la indisposición que le impidió jugar en Madrid, jugará este jueves salvo sorpresa.
Indispuesto el pasado domingo, y por tanto baja en el partido contra el Atlético de Madrid, Frenkie de Jong viajó el lunes entre dudas a la concentración de la selección holandesa en la ciudad deportiva de la KNVB en Zeist. El jugador, sin embargo, tenía muy claro que, en la meda de lo posible, se quedaría; y este martes ya se ejercitó con el resto de sus compañeros. En cierto modo, se siente en deuda moral con su país. De Jong sólo ha jugado uno de los últimos 20 partidos de la ‘Oranje’. Fue ante Hungría en noviembre. Básicamente, dejó de ir con asiduidad desde septiembre de 2023 por sus recurrentes problemas en el tobillo derecho.
De Jong se lesionó tres veces en la misma zona la temporada pasada. La primera, en Montjuïc contra el Celta (23 de septiembre de 2023). El 3 de marzo de 2024, volvió a recaer en Bilbao, donde sólo jugó 26 minutos. Y mes y medio después, el 21 de abril, volvió a lesionarse en el Bernabéu. Allí dijo adiós a la temporada. Con el Barça lejos de la carrera por los títulos, el club le dio permiso para que hiciese un parón para que intentase llegar a la Eurocopa. Ahí empezó el conflicto.
De Jong acudió a la concentración de la selección holandesa para empezar a preparar la Eurocopa de Alemania. El 3 de junio, hizo unas declaraciones que encendieron las alarmas en Can Barça: “Estoy preparado para correr riesgos”. El club azulgrana se movilizó y, finalmente, De Jong, presionado y lesionado, renunció a la cita. Entonces, fue Koeman quien se encendió.
El seleccionador holandés, con cuentas pendientes en el Barça, que lo despidió de mala manera en octubre de 2021 antes de fichar a Xavi, acusó al club azulgrana. “Decidieron correr riesgos y es el precio que tenemos que pagar”. Koeman creía tener información privilegiada y acusaba indirectamente al técnico de haber presionado al jugador para que estuviese disponible en el Clásico de abril. El futbolista llegó a admitir que reapareció “demasiado pronto” después de su segunda lesión.
El ‘conflicto De Jong’ explotó en el momento de peor relación jugador-club, que le puso entre la espada y la pared; bajarse la ficha o marcharse. De Jong estaba ‘cojo’ y enfadado. Las cosas han cambiado ahora. Piensa en su renovación con el Barça.
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