De Bari al Metropolitano: “Todos tenemos un lugar donde ser felices”
Giulio Modesti es socio del Atlético y lleva media vida viniendo a Madrid a ver al equipo rojiblanco. Hace dos domingos cumplió un sueño. Trajo al Atlético-Barcelona a su madre, de 86 años, para que descubriera la pasión de su hijo por el Atlético.


De Bari a Madrid. Y de Madrid a Bari. 4.800 kilómetros (ida y vuelta) entre la bonita ciudad italiana y la capital de España. Y así varias veces al año y durante muchos años. ¿Destino? Primero el estadio Vicente Calderón. Luego, el Metropolitano. La vida del italiano Giulio Modesti cambió cuando le entró la pasión del Atlético en sus venas. Tanto, que el club rojiblanco se convirtió en uno de los motores de su vida. Giulio, socio número 25.407 del Atlético, suele desplazarse a Madrid cada vez que hay partido grande y también lo hace por Europa cuando el conjunto madrileño disputa competición continental.
Esa pasión y ese sinvivir por el Atlético le provocaron también algunos pequeños problemas en el seno familiar. ¿Por qué tanto ir y venir a Madrid? ¿Cuál es el motivo de ese sentimiento tan profundo por un equipo que no es de tu país? Preguntas que tuvieron respuesta hace dos domingos, con motivo del Atlético-Barcelona de Liga. El aficionado del equipo rojiblanco ya había visto algún partido del Atlético en Madrid con su hijo. Por ejemplo, la pasada temporada en un inolvidable Atlético-Inter de Champions, donde los rojiblancos pasaron por penaltis y dejaron fuera a un Inter que estaba intratable. El joven Andrea Modesti, socio infantil número 48.696, no olvidará ese partido.
Pero faltaba ponerle la guinda al pastel. Giulio invitó a su madre al Metropolitano para ver en directo el encuentro de los de Simeone ante el Barcelona. La cosa no acabó bien, pero quizá eso fue lo de menos en este caso. Brigida Tondolo encontró las respuestas a las preguntas que tantas veces se hizo. Las encontró viendo el ambiente en el estadio del Atlético, la pasión de la afición rojiblanca, antes y durante el partido. “Lleva media vida aguantando mis viajes. Y tragándose junto con mi padre todos los partidos de nuestro Atleti. Se sabe los nombres de todos los jugadores”, dice orgulloso Giulio, quien pasó unos días inolvidables junto a su madre y a su hijo en la capital de España. Se cumplió un sueño.
Brigida celebró en Madrid sus 86 años: comió junto a todos los amigos del Atlético de Giulio, vio el Metropolitano, presenció el Atlético-Barcelona... :”¿Ahora lo entiendes todo?”. La pregunta de Giulio hacia su madre era evidente y la respuesta pone el punto... y seguido a esta bonita historia de amor por unos colores: “Todos tenemos un lugar donde somos felices. El tuyo está aquí. Tú elegirías siempre al Atleti”. Brigida ya no le preguntará más a Giulio los motivos de su próximo viaje. De Bari al Metropolitano. Del Metropolitano a Bari. Una vida en rojiblanco.
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