Darder se toma un periodo de reflexión para decidir su futuro
El capitán del Espanyol no quiere elegir “en caliente” si seguirá en Segunda en su “casa” o aceptará una oferta para seguir en la elite. “Me he involucrado demasiado en este club”, advierte.
Entre multitud de protestas, de quejas, de críticas hacia arbitrajes, Federación, Chen y todos los estamentos posibles que han colaborado en el descenso del Espanyol, sólo un nombre propio revirtió ese ambiente hostil para, sin ningún preparativo previo ni concertación, en un momento se escuchara un cántico unánime. Fue el “¡Sergi, quédate!” que la grada del RCDE Stadium al unísono le dedicó a Sergi Darder cuando Luis García decidió sustituirlo este domingo ante el Almería (3-3). En la despedida de Primera. Y quién sabe si la del capitán perico.
La incertidumbre no se resolverá en unas horas. Ni en cuestión de días. Tras una temporada poco menos que insoportable, sin tregua y con un desenlace fatal, en la que ha llevado la carga de la representación del vestuario, Darder ha decidido tomarse un tiempo. Desconectar. Y elegir su futuro tras unas vacaciones que necesita por higiene mental. Más incluso que física, pese al tute de partidos que acumula. La consecución de un segundo descenso con el Espanyol puede ser una losa demasiado pesada para un futbolista de su categoría. Y ofertas en la elite no le van a faltar. Pero será una lucha entre lo que le pide el cuerpo y el corazón.
“Todos necesitamos limpiar la cabeza para tomar la decisión correcta”, asumió el mediocampista en el RCDE Stadium, tras bajar el telón frente al Almería, y en paralelo a que su extécnico Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’ anunciara su salida del club indálico. “Todo el mundo sabe que esta es mi casa, que ha sido una temporada muy dura, con muchas emociones positivas y sobre todo negativas. Pero no es momento pensar lo que pasará a uno o dos meses vista, sino de coger unos días, desconectar, porque cualquier decisión en caliente tras unas semanas tan frustrantes no serviría”, reconoció.
Para quienes sean dados a las pistas, Darder las lanzó en todos los sentidos. Una frase palmaria que presume su marcha: “Me he involucrado demasiado en este club, he antepuesto las cosas del colectivo a las individuales, y no he sido capaz de conseguir la salvación”. Y otra para los optimistas: “Si me tengo que guiar por el corazón, yo soy del Espanyol siempre”. “Yo estoy para lo que necesite el club en todo el momento”, añadió.
Pase lo que pase con su futuro, el capitán del Espanyol insta a un club a hacer autocrítica en todos sus estratos. “Tiene que ser un antes y un después en muchísimas situaciones. El club, para no repetir los errores que te llevan a un descenso. Y los jugadores, que somos los que estamos en el campo”, admitió. Que se produzcan cambios drásticos en el club también puede contribuir a su continuidad.