“Con este libro he querido hacer una memoria de la historia del Atleti”

Rubén Uría (Madrid, 1975) estuvo a punto de no terminar de escribir este libro. ‘120 historias del Atlético de Madrid’ (Córner), su quinto, su segundo sobre el equipo rojiblanco (‘De muerto a campeón’, Crónicas). Un libro que recorre desde lo general los 121 años de historia rojiblanca a través de lo particular: el detalle, la anécdota. En 336 páginas que rezuman Atlético. Y precisamente por ello lo terminó: porque de la mano de su padre, Manolo, fue de la que Rubén llegó al Calderón y se hizo del Atleti y, aunque la muerte de éste mediado el manuscrito fue un tajo (“el ponerme de nuevo a escribir me costó mucho”), la tristeza, la nostalgia, el ya nunca más poder comentar con él los partidos, al Atleti, también una promesa que le hizo le empujó. “Le prometí que lo iba a empezar y acabar”, dice esta tarde en un taxi camino del FNAC de Callao, en Madrid, con su teléfono echando sin parar de interrumpir llamada a llamada, mensaje a mensaje. Pero es que esta tarde, desde el tercer anfiteatro, Manolo sonreiría. Su hijo en el salón de actos de la librería presentando al público su promesa cumplida. A su lado, Fran Guillén como conductor. Ante sí, una platea llena, con decenas de personas que no se lo quisieron perder. Con el libro completo en las manos. Muy cerquita del corazón. Y allá donde siempre se lleva también el escudo.

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¿Por qué todos los atléticos deben leerse ‘120 historias del Atlético de Madrid’?

Es un libro cabecera para toda biblioteca atlética. Contiene sus 120 años de historia, con una anécdota simpática y divertida por cada año de vida. Ameno, didáctico y, sobre todo, de lectura muy sencilla para hacer una memoria de toda la historia del Atleti. De los años 30, 60, 70, mucho de la actualidad, última década.

Mientras escribía recibió un duro golpe: su padre falleció de Esclerosis lateral amiotrófica (ELA)…

Cuando llevaba la mitad. Volver a ponerme a escribir fue complicado.

¿No le ayudaba a desconectar?

Eso sí, pero me costó volver a ponerme, con todo el dolor que tenía. Pero una vez que lo conseguí, me servía para mantener la cabeza ocupada y no pensar en aquello que me faltaba. Yo le había prometido que iba a empezarlo y acabarlo y así hice (sonríe triste).

Su libro tiene, de hecho, todo por su padre, porque él fue quien le hizo del Atlético, ¿no?

Sí. Yo soy del Atleti por mi padre, como eso que se dice: “De padres a hijos”. A mí me llevó de pequeñito al Calderón a ver un partido del Madrileño, cuando era gratis, y eso se me quedó grabado. El campo, las almohadillas, todo rojo, para toda la vida ya. Sin él no hubiera sido del Atleti, claro, él me llevó.

¿De todas las anécdotas, cuál no conocía o le ha sorprendido más?

La mayoría las tenía en la cabeza porque estoy a punto de los 50, otras las he recordado y algunas las he descubierto mientras escribía el libro. La del pago de Gil a Futre con el Porsche amarillo o el día que arrestaron a Manolo haciendo la mili, la visita al hospital de parapléjicos de Toledo que me contó Kiko. Hay muchísimas anécdotas pero dos muy marcadas. La del Porsche amarillo y una que me contaron de Luis que no había escuchado nunca y que va sobre un diálogo con Santos Ovejero en el que le dijo: “Los entrenadores debían ser un poco actores” y después vino una bronca con Futre…

Ha tardado un año y medio en escribirlo tras muchas y muchas charlas con veteranos y leyendas del club, ¿le ha costado mucho elegirlas? Imagino que habrá dejado muchas fuera.

Sí (ríe). Me ha resultado muy ameno y divertido. Hablabas con un exjugador, le pedías una anécdota y te contaban diez. Me he pasado todo el tiempo reescribiendo cosas que ya tenía al contarme nuevos matices. Ha sido muy difícil elegir entre anécdotas de Luis, Kiko y Futre porque tenían ciento y pico cada uno.

Cuando en febrero anunció que su libro se iba a poner a la venta el 25 de abril se convirtió en el número 1 de libros de deportes más vendidos en Amazon… solo de las reservas para la preventa… ¿Cómo se sintió ante eso?

¡Eso fue tremendo! Me llamaron de la editorial para decírmelo. Yo pensaba que no se podía reservar si no estaba a la venta y se puso número 1…

Pero es que usted es una de las grandes voces rojiblancas de este país, algo acrecentado con ‘Club Uría’ su canal de Twitch, donde cada día hace horas y horas solo de información del Atlético…

Nueve meses llevo con el canal, como un parto (ríe). Ayer batimos récord, 800 personas en el Twitch y 400 en Youtube, en total 1.200. En dos meses ya estamos con más gente que el Madrid…

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