Chimy: “Los béticos ya saben que estoy un poco como una cabra”

Chimy Ávila ya sabe lo que es marcar en el Benito Villamarín con la camiseta del Betis. En su segunda titularidad, el argentino encontró la meta contraria para abrir el marcador del duelo ante el Athletic y poner la locura en las gradas heliopolitanas. Es precisamente su locura uno de los ingredientes que buscaba el club bético a la hora de hacerse con sus servicios en este pasado mercado de invierno. Pellegrini quería hilos de revolución y la tiene con el argentino, que pretende hacerse con un puesto de privilegio en el dibujo del chileno a partir de este momento y hasta el cierre de la campaña.

“Los béticos ya saben que estoy un poco como una cabra y que siempre voy al máximo”, asegura el jugador durante un trozo de entrevista compartida por los medios oficiales del Betis. Él tiene claro que, a veces, debe controlar un poco sus emociones: “Hoy con la calidad de jugadores que tenemos, sé que tengo que bajar un poco la revolución y adaptarme al buen pie que hay. Podré aportar un poco de locura, que es lo importante”. En este sentido, Chimy ya dejó claro ante el Athletic que ese carácter le da mucho al equipo. Su pasión e intensidad contagió a parte del grupo en esa cita que terminó con victoria heliopolitana.

Pellegrini también confía en que Chimy sea relevante en su esquema y ya lo situó en el lado izquierdo del ataque. Su apuesta funcionó desde el inicio, aunque el regreso inminente de Ayoze Pérez podría cambiar este escenario con miras al futuro. Mientras, el argentino tiene claro su rol: “Dejaré todo en cada balón, es lo que identifica al Chimy Ávila o al comandante, o la cabra, como lo quieran llamar. Por perdida no doy ninguna... Y a quien toque a un compañero mío, ahí estaré. Creo que puedo aportar esa hermosa locura”.

Chimy fue protagonista también de una conversación previa al duelo ante el Athletic cuando las cámaras de televisión esperaban la salida de los jugadores al césped del Benito Villamarín. Pablo Fornals y Aitor Ruibal hablaron del papel que podía tener el argentino en escena y ya tenía en cuenta ese carácter apasionado de su compañero. “Hay que intentar que Chimy no cree una guerra desde el principio”, avisaba Fornals, mientras que Ruibal lo tenía claro: “La va a crear”. Lo que ocurrió después fue un rendimiento notable del atacante para ayudar al Betis a conseguir un triunfo de vital importancia en su lucha por Europa.