Carvajal: “Mi objetivo es llegar al Mundial de Clubes”

“Mi objetivo es volver en el Mundial de Clubes (15 de junio-13 de julio). Me lo pongo como objetivo, pero cuando se vaya acercando la fecha... veremos si es factible o no”, responde Carvajal, en una entrevista con Esquire. Una charla en la que rememora el momento de la lesión (“sentí que la rodilla se me destrozaba”) y los días posteriores (“me sorprendió recibir un mensaje del Cholo; más allá de la rivalidad, le admiro”). Confía en el equipo (“en marzo-abril veremos dónde estamos”) y rehúye hablar del ‘plantón’ al Balón de Oro (“prefiero evitar responder porque, diga lo que diga, se podrá malinterpretar”). Sobre su futuro, por último: “No me parecería descabellado acabar en Qatar. Ya he dicho que, si alguna vez salgo del Real Madrid, no jugaré en Europa; no competiré contra él ni en Champions, ni en España”.

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Fragmentos de la entrevista

―¿Cómo recuerda el momento de la lesión?

―Siento que la rodilla se me destroza, hablando mal y pronto. Ha sido una lesión importante, pero son gajes del oficio y hay que afrontarlos siendo consciente de lo que tienes; pero con ilusión, ganas y a por todas. Esto es solo una piedra más en el camino.

―¿Le sorprendió alguno de los mensajes de ánimo que recibió?

―La verdad es que me he sentido muy querido, muchísima gente me ha escrito, llamado, mostrado su apoyo y cariño... y aprovecho para agradecérselo. Pero sí es verdad que hubo un mensaje que me sorprendió gratamente: el Cholo Simeone. Una persona que ama el fútbol y a quien admiro muchísimo, más allá de la rivalidad, obviamente. Creo que compartimos la visión de vivir este deporte con mucha emoción y recuerdo ese mensaje como un momento especial. Desde aquí le mando también un fuerte abrazo.

―¿Qué opina de las críticas al calendario?

―Es un tema muy complejo. Al final el número de jugadores que son titulares en su club, que juegan tres competiciones y que son titulares en la selección... se reduce a un cupo muy escaso. Hablamos de 50-60 futbolistas. La carga que tienen esos 50 comparada, con todos mis respetos, con un jugador del Leganés, por ejemplo, pues no es la misma. Pero también va en el sueldo, ¿no? Yo me incluyo, en este caso, aunque ahora esté lesionado. En ningún momento hemos dicho que se juegue menos y cobremos menos.

―¿Cómo está viendo al equipo?

―Desde fuera se sufre mucho más. Tienes un prisma diferente del equipo, de cómo puedes ayudar. Intento aportar mi granito de arena, hablar con los compañeros, preguntar cómo están. Y sobre cómo lo veo… desgraciadamente estamos sufriendo muchas lesiones, importantes y no tan importantes, pero que cuando se juntan dos o tres... ya te impide rotar y aumenta el riesgo de más lesiones. Yo creo que de momento lo estamos salvando bien. Este año ha llegado a un jugador importante como Mbappé, pero también se nos han ido jugadores como Kroos, Nacho o Joselu. Tienes que adaptar todas las piezas del puzle. En marzo o en abril veremos dónde estamos.

―¿Llegará al Mundial de Clubes?

―Ese es mi objetivo. A principios de junio se cumplirán ocho meses de la cirugía. Veremos cómo avanza todo. La rodilla lleva sus tiempos. Yo me lo pongo como objetivo, pero cuando se vaya acercando la fecha veremos si es factible o no.

―¿Qué opina de todo lo que pasó con el Balón de Oro?

―Prefiero evitar la pregunta. Entiendo que me preguntes, pero prefiero evitar responder porque creo que diga lo que diga se puede malinterpretar. Yo solamente te puedo decir que, si no estoy equivocado, creo que soy el lateral derecho que más alto ha quedado en una gala del Balón de Oro y, más allá de merecer ganarlo o no, estoy muy orgulloso y mi familia también. Que me llegue algo así con 32 años es para estar feliz.

―En algún momento llegó a pensar... “¿Y si lo me lo dan a mí?”.

―A ver... sí que se te pasa por la cabeza. Piensas: “Lo he ganado todo, he sido importante”. Pero es complejo... entiendes que desde la posición de lateral derecho es mucho más difícil ganar un Balón de Oro.

―¿Qué le cuenta Joselu de Qatar?

―Está encantado. Es otra experiencia, ¿verdad? Es una competición en la que todos los estadios están cerca, hay una calidad de vida muy alta. Y él se lo ha ganado, tener esa remuneración económica importante que ponga un colofón espectacular a su carrera. Estoy muy feliz por él, por mi cuñada y por mis sobrinos. Sí, me dice: “Aquí te estoy esperando; te estoy guardando el lateral derecho” (ríe).

―¿Se plantearía en un futuro una experiencia así?

―Sí, sin duda. No me parecería algo descabellado. Ya he dicho que si alguna vez salgo del Real Madrid no jugaré en Europa, no competiré contra el Madrid ni en Champions ni en España. Y sería un destino probable.

―¿Y piensa mucho en el futuro?

―No, y me da pánico. Me da pánico levantarme un día y no irme a entrenar. Uf, me aterra. Por eso intento disfrutar el día a día a tope. Ahora incluso veo a mis compañeros entrenar y digo: “Ay, ojalá pudiera estar ahí”. Le das más valor a pisar el césped. Ir al club, estar con mis compañeros, hacer mis sesiones de gimnasio, estar en la sala de fisios, hablar con uno y con otro, le doy mucho valor a todo eso porque sé que se está acabando y hay que disfrutarlo.

―¿Cómo que se está acabando?

―Bueno, tengo 32 años, ya no soy un niño. ¿Qué me pueden quedar? ¿Cuatro o cinco años de fútbol? Es poco, el tiempo pasa rápido.

―¿Le han ofrecido hacer algún documental sobre tu vida? Están muy de moda...

―Sí, me lo han ofrecido, sobre todo ahora con el tema de la lesión. Varias plataformas han querido documentar este momento, pero lo he rechazado. Puede ser algo bonito pero no va con mi modo de ver las cosas en mi familia, en mi entorno. A mí me gusta trabajar en la sombra, en silencio todos los días, muy focalizado en lo que tengo que hacer. No soy de mostrar mucho mi vida, mi capacidad de sufrimiento o de esfuerzo. Eso me lo llevo para mí todas las noches.