Braithwaite en el Parken: del día “más terrible” a la felicidad
El delantero del Espanyol reedita el escenario y el rival, Finlandia, del día en que Eriksen sufrió un paro cardíaco en plena Eurocopa 2020. Su compatriota se recuperó, él sigue en Dinamarca.
Ya ha vuelto a jugar algunas veces en el Parken Stadium de Copenhague, sin ir más lejos en la sonada victoria ante Francia (2-0) del pasado septiembre, previa a una Copa del Mundo que no acabaría respondiendo a las expectativas. Pero este jueves Martin Braithwaite, junto a los otros componentes de la selección danesa que repiten de entonces, volverá a pisar el mismo escenario y a enfrentarse al mismo rival que en una de las fechas que más marcadas le quedaron en su carrera. El 12 de junio de 2021.
El atacante del Espanyol, autor de ocho goles en esta Liga y poseedor de una versatilidad con Diego Martínez que ha convencido a Kasper Hjulmand para llevárselo a diferencia de otros internacionales de su generación (“puede estar en la derecha, el centro y por la izquierda”, argumentó el seleccionador el día de la convocatoria), formará parte del encuentro ante Finlandia, clasificatorio para la Eurocopa de 2024 y reedición de aquel que abrió la misma competición pero en 2021. Y en que el paro cardíaco del capitán danés, Christian Eriksen, sobrecogió al mundo. Empezando por sus más compañeros, quienes formaron un círculo mientras los servicios médicos le devolvían el pulso.
“Experimenté una de las situaciones más terribles de mi vida. Lo que era el evento deportivo más importante en la historia de Dinamarca se convirtió en una pesadilla”, explicaría Braithwaite semanas más tarde de aquel funesto suceso, en un documental. “Hubo un momento que le miré y él se había ido. Cuando le ves o cuando ves a su cuerpo... donde la persona está muerta, no hay duda. Lo sabes de inmediato. Es lo que vi”, recordaba.
“Empecé a rezar mucho. Sentí que era la única cosa que podía hacer en ese momento. Mirar a Dios. Teníamos a todos los médicos trabajando en él y esa imagen... Es algo que no deseo que nadie vea. Tuvimos un final feliz. Christian está bien, y esa es la única cosa que queríamos”, resumió Braithwaite, quien casi dos años después y envuelto en la felicidad de seguir viviendo en Barcelona junto a su familia, emprende una nueva aventura con Dinamarca antes de retomar, a partir de la próxima semana, la misión perica de la permanencia.