Baraja, un técnico de andar por casa
El entrenador ha caído de pie en Mestalla. En su trayectoria como preparador, sólo perdió siete partidos como local de 67 que disputó. Ahora mismo, su Valencia está fuera de la zona roja.
Nadie duda por Valencia que Rubén Baraja ha caído de pie en Mestalla. Dos victorias consecutivas, ante Real Sociedad y Osasuna, han terminado de reconectar a la grada con el Pipo. En el mismo escenario en el que fue idolatrado como jugador, el vallisoletano se ha puesto el mono de trabajo para sacar al Valencia del descenso. Y ahora mismo, su equipo está fuera de la zona roja.
La conexión de Baraja con Mestalla es total. Los gestos del entrenador, sus efusivas celebraciones y sus mensajes en las ruedas de prensa, como “Mestalla juega”, han conquistado a la afición ché. Sin duda, a Baraja le han ayudado las dos victorias que ha logrado como local, de forma consecutiva. Ante Osasuna, su equipo se mostró como una roca y el rival ni siquiera le disparó a puerta.
Baraja es un entrenador de andar por casa. Lo dicen los números que ha firmado como local a lo largo de su trayectoria como técnico. Aunque es la primera vez que pisa la élite, al Pipo siempre se le dio bien jugar ante su gente. Al menos, perdió muy poco. En el Elche, Sporting, Tenerife, Rayo y Zaragoza sólo cosechó siete derrotas en total cuando compitió delante de sus aficionados. De momento, las cuentas en el Valencia también le salen con dos triunfos en dos partidos.
Baraja ha dirigido 67 partidos en Liga como local. Y el balance es positivo porque ganó 33 y empató 27. Sólo perdió esas siete veces. En el Elche completó una temporada completa, y cosechó dos tropiezos en el Martínez Valero. Con el Sporting, Tenerife y Zaragoza sólo perdió un partido como local. Con el Rayo, sufrió dos tropiezos. Ahora, el reto de Baraja es cambiar la tendencia lejos de Mestalla. En el Metropolitano, le espera un objetivo mayúsculo.