Asensio depende de Brahim
La renovación del balear sigue estancada y en el Real Madrid cuentan con Brahim para la 2023-24. Una eventual salida de Hazard podría desatascar la situación.
Otro de los jugadores de la actual plantilla del Real Madrid con el futuro en el aire, además de los Kroos, Ceballos, Modric o Nacho (Benzema, como ya informó AS, seguirá hasta 2024 tras adjudicarse el Balón de Oro), es Marco Asensio. El balear finaliza contrato el próximo 30 de junio y sigue sin haber noticias al respecto, pese a que está firmando una segunda parte de temporada brillante: lleva diez goles y seis asistencias en 1.494 minutos, por lo que participa en un tanto cada 93 minutos este curso. Es el quinto goleador del equipo, por detrás de Benzema, Vinicius, Rodrygo y Valverde.
El verano pasado el Real Madrid esperó que llegasen ofertas por el balear cuando sólo le quedaba un año de blanco, pero el que por entonces era nuevo agente de Asensio, el portugués Jorge Mendes, no trasladó propuesta alguna al club. Ahora la situación ha cambiado, el mallorquín desea quedarse y espera una oferta que, de momento, no llega.
Y puede que no llegue porque el Madrid está valorando qué hacer con Brahim. El malagueño, que termina el 30 de junio su cesión en el Milán, regresará a la disciplina madridista y en el club cuentan con él para la temporada 2023-24. Pero tanto él como Asensio no caben y es previsible que al club le toque elegir, tratándose de dos jugadores de perfil muy parecido, atacantes de banda con capacidad para jugar por dentro y que partirían como suplentes para dar refresco a los titulares.
El sitio de Hazard, clave
La única opción que tiene el Real Madrid para encajar a ambos en la plantilla de la temporada 2023-24 es que logre dar salida a Hazard, algo que parece muy complicado en estos momentos. El belga, el jugador mejor pagado de la plantilla (30 millones brutos por temporada) y que apenas cuenta (sólo ha disputado 331 minutos esta temporada), ya dejó claro recientemente que no tiene intención de abandonar el Madrid, pese a que sabe que no cuenta para Ancelotti y que está muy lejos de robarle minutos a Vinicius, Rodrygo, Valverde o Asensio.
En verano el Madrid explorará la posibilidad de mandarlo a algún equipo de su elección, aunque ello conlleve pagar la práctica totalidad de la ficha; llegados a este punto, el Madrid da por perdido ese dinero que el belga tiene firmado (acaba contrato en junio de 2024) y lo único que puede sacar en claro es su ficha para encajar ahí a un jugador que sí cuente mínimamente para Carletto. Pero hace falta el “sí” de Hazard y, de momento, no parece el belga proclive a moverse.