Aprobados y suspensos del Mallorca: ‘San Abdón’ resolvió en la última jugada
Un remate milagroso en la última jugada le dio los tres puntos a los bermellones
Rajkovic: El meta mallorquinista resolvió sin problemas los balones por altos con presencia, seguridad y confianza. Apenas tuvo situaciones de riesgo y la ocasión más clara del rival se estrelló en el larguero sin que el serbio pudiera hacer nada más. Su defensa es una garantía y los delanteros del Valladolid apenas le pusieron a prueba.
Gio González: El lateral derecho uruguayo fue titular cundo quien más quien menos ya esperaba en su posición natural a Pablo Maffeo que se quedó en el banquillo. Gio cumplió con sus funciones: cerrar la banda derecha de la defensa e incorporarse al ataque aunque sus centros no llegaron al destino deseado, bien por demérito propio o porque no había rematadores en su lugar adecuado.
Valjent: El eslovaco regresaba al once titular después de perderse el partido en Getafe por dos motivos, estaba sancionado y además tenía problemas en una rodilla. Estuvo en su nivel, compartiendo tripleta de centrales con Raíllo y Copete aunque sin excesivos problemas a la hora de maniatar a los atacantes pucelanos. Tras cumplir ciclo de amonestaciones, ya ha visto la primera amarilla del segundo ciclo.
Raíllo: Imperial. El capitán, manda y ordena, su jerarquía le convierte en uno de los imprescindibles del equipo de Aguirre como ya lo fue de anteriores entrenadores. Su entendimiento con Valjent es pleno y a su lado, Copete, crece como la espuma.
Copete: Nadie diría que está jugando su primera temporada en Primera división. No desentona para nada junto a centrales experimentados como los dos anteriores. A su juego, une carácter, confianza y hasta se atreve a protestar en jugadas conflictivas.
Jaume Costa: El veterano lateral no se encontró a sí mismo, trató de subir la banda como es habitual pero perdió más balones de lo habitual y no conectó con sus centros desde la banda. Estuvo muy pendiente de las protestas y de buscar faltas.
Ruiz de Galarreta: Es la brújula del equipo. Todo balón pasa por sus botas. Estuvo serio, aportando juego a las bandas, filtrando pases interiores, buscando siempre al compañero más adecuado y marcando el ritmo necesario para el juego del equipo. Da velocidad o ralentiza en función de los necesario y sostuvo al equipo desde el centro del campo.
Baba: Se llevó algún silbido desde la grada porque la gente espera más de él y de sus posibilidades y condiciones. En la primera parte fue el escudero ideal de Galarreta, le hace el trabajo sucio para que el vasco luzca más si cabe. cuando roba y entrega fácil cumple, si hace más de la cuenta, comete errores.
Dani Rodríguez: Está en un momento de forma parecido al mejor Dani, en la primera parte trató de enlazar con el punta y trató de desequilibrar en ataque. Hubo momento en los que desapareció del juego cual Guadiana que aparece y desaparece. Parece haber recuperado la titularidad.
Amath: Estuvo voluntarioso, lo prueba todo, regates, carreras, encara, busca portería, pero en todas sus acciones acabó decidiendo mal y eso le privó de acercarse al gol. Intenta asociarse con los compañeros y se le ve metido en harina, pero quizá le sobra algo de ansiedad para encontrar su mejor juego.
Muriqi: No tuvo su día. Ningún remate a portería como tampoco lo hizo en Getafe. Peleó, intentó arrastrar al equipo pero lo hizo durante el partido desde muy lejos de la portería y sin oportunidades de rematar porque no recibió balones desde las bandas, su mejor especialidad. Lleva dos partidos de liga sin marcar aunque sí lo hizo en Copa.
Los cambios de Aguirre:
Kang-in Lee: Revolucionó el partido. sorprendió su suplencia y desde que salió en el minuto 61, el Mallorca llegó al área y le puso una marcha más al equipo en busca de una victoria que, finalmente llegó en el último minuto del partido gracias a una asistencia suya, a balón parado, para que rematara Abdón Prats.
Maffeo: El habitual lateral derecho titular fue suplente, se quedó en el banquillo y también tuvo su aportación en el gol pues fue el jugador que sufrió la falta que ejecutó Kang-in Lee con remate final de Abdón para anotar el gol de la victoria.
Kadewere: Practicamnete inédito. Entró para movilizar el ataque y aportó poco, quizá ensombrecido por la actuación de Kang-in Lee que sí marcó diferencias en el juego ofensivo.
Abdón Prats: Al hombre-milagro del Real Mallorca le bastaron diez minutos. sustituyó a Muriqi a siete minutos del final y entre esos siete y cuatro de añadido, marcó el gol de la victoria en la última jugada del partido. Los goles milagrosos del Mallorca tienen nombre propio y lo que parece un recurso se ha convertido en un argumento o en una costumbre. Le dio los tres puntos a su equipo.
Cufré: Apenas tuvo tiempo de participar, entró por Jaume Costa en el lateral izquierdo para refrescar al equipo en esas llegadas por banda.