Aprobados y suspensos del Espanyol de cada domingo
Los blanquiazules suman un punto de Cádiz después de otro error en la portería (1-0), de una exhibición goleadora de Joselu (1-2) y de su falta de juego y consistencia (2-2).
Lecomte: Regresaba a la portería después de los dos errores consecutivos de Álvaro Fernández. Arriesgó y se mostró seguro con los pies al comienzo, pero de nuevo cometió un error grave en la jugada del 1-0, cuando salió a por uvas en un saque de banda, y después no pudo detener el tiro a bocajarro pero centrado de Lucas Pérez. No tuvo de nuevo su día.
Calero: El central jugó nuevamente como lateral derecho por segunda jornada consecutiva. El Espanyol ganó altura y defensa de área, como ejemplo: una cobertura providencial después de un centro de Sobrino. Pero perdió velocidad defensiva y profundidad por el costado. El vallisoletano no subió y se vio superado en varias ocasiones, especialmente sufrió con las incorporaciones de Espino, como le ocurrió de nuevo en el gol del 2-2 al quedar atrás después del cambio de ritmo y el despiste en la acción.
Sergi Gómez: Hizo de nuevo pareja con Cabrera en el centro de la defensa. Se vio superado en los primeros 45 minutos, le faltó una chispa más para frenar la movilidad de Sobrino o imponerse a Negredo. El futbolista no arriesgó en la salida de balón y creció como el Espanyol, con el paso de los minutos. Los atacantes gaditanos apenas crearon peligro hasta el tramo final.
Cabrera: Aunque se sigue sin ver la mejor versión del uruguayo, se impuso en la mayoría de duelos aéreos, también en los ofensivos. Remató dos córners aunque sin precisión. Controló a Negredo salvo en alguna acción de estrategia, como en los saques de banda, aunque con balón abusó del juego directo a Joselu, consigna táctica en una primera mitad en la que el equipo apenas dio más de tres pases seguidos. Acabó sufriendo con tantos centros del rival.
Brian Oliván: Le tocó lidiar con el rival más peligroso. Alejo tiene muchos recursos y Oliván sufrió pero lo contuvo en la mayoría de duelos. Nuevamente fue el más fiable y regular, a lo que hay que añadir el soberbio centro del 1-1 de Joselu. Un golpeo en parábola al segundo palo que tenía telegrafiado el gol. Muy consistente, sostén del Espanyol por la izquierda.
Aleix Vidal: Pasó totalmente desapercibido en la primera parte, mejoró el nivel después cuando el equipo perico, con 1-0, dio un paso adelante. En campo contrario encontró más veces posición de centro y asistió a Puado para convertir el 1-2 después de un formidable autopase, pero el delantero barcelonés se topó con Ledesma. Acabó sustituido en el que era su primer encuentro de titular.
Darder: La primera parte vio los balones volar por encima de su cabeza. Mala señal para un Darder melancólico sobre el césped. En la segunda mitad fue más agresivo en la presión y encontró su mejor juego. Sus conducciones por dentro provocaron superioridades y le sacaron tarjetas al Cádiz, como la de Zaldua. Le faltó acierto en algún contraataque y acabó sustituido debido a unas molestias musculares.
Expósito: Fue de menos a más también. El jugador jugó de mediapunta en la primera mitad, especialmente sin balón, cuando acompañó a Joselu en la presión. Un sistema que no funcionó y ofreció la peor cara del Espanyol. En la segunda mitad actuó por la izquierda y puso la guinda con una asistencia de oro a Joselu, que no perdonó. Al futbolista, eso sí, le costó darle continuidad al juego y asociarse más con Darder.
Vinicius: Cuando los partidos se vuelven caóticos, como en el segundo tiempo, el brasileño luce mejor sus virtudes. Es de distancias largas más que de cortar, y fue ahí cuando corrigió los espacios y anuló varios contraataques. Ayudó en el juego aéreo y acabó con molestias también por el esfuerzo.
Melamed: Regresó a la titularidad per tuvo que salir del terreno de juego lesionado antes del minuto 40. Vio una amarilla a los 12 minutos por defender mal uno contra uno ante Alejo y tener que cometer una zancadilla. Tomó dos malas decisiones en ataque en dos transiciones y probó el único remate a puerta de la primera parte que detuvo Conan Ledesma. No estuvo a buen nivel, como el resto del equipo.
Joselu: Al margen de aportar todo el trabajo en la fase defensiva, y de ser la diana que todos sus compañeros buscan en cada ataque, mantiene un olfato goleador que podría firmar el mismo Raúl de Tomás de la pasada campaña. El 1-1 es fruto de un gran desmarque alejándose de Víctor Chust y un inapelable remate de cabeza, mientras que el segundo, a pase Expósito, reúne la pausa y la precisión necesaria de cualquier nueve de nivel. El delantero pidió intensidad a sus compañeros en todo momento y ayudó a mantener el empate al final.
Puado: Salió en el 37 por la lesión de Melamed y tuvo dos oportunidades, una de ellas claras, para que el Espanyol sumara un gol más. El primero de ellos lo sacó con una tremenada parada Ledesma, mientras que el segundo de nuevo el meta argentino se interpuso entre el barcelonés y el gol. El jugador sigue con su infortunio en los remates.
Keidi Bare: Dio aire al mediocampo y le tocó vivir los últimos minutos en los que el Cádiz apretó con hasta cuatro saques de esquina seguidos. No logró imponerse técnicamente en mediocampo pero colaboró para defender el 2-2.
Lazo: Regresaba después de la lesión pero apenas tuvo participación.
Lozano: Jugó prácticamente el tiempo añadido, con poca participación en el juego.
Óscar Gil: Vio una amarilla por una entrada brusca y defendió las acciones a balón parado.